Los sindicatos del Metro de Barcelona se plantean repetir durante el próximoCongreso Mundial de Móviles (MWC) los paros que complicaron la movilidad de la ciudad durante la última edición de este evento internacional como medida de presión para avanzar en la negociación del convenio colectivo.

Tras un par de meses en el que las negociaciones del convenio han estado paralizadas, la dirección y el comité de empresa del Metro han retomado en las dos últimas semanas las conversaciones que deberían terminar en un acuerdo que haga posible un nuevo documento para el período 2016-2019, que sustituirá al prorrogado desde 2008.

En las cuatro reuniones de esta nueva etapa celebradas hasta ahora, los sindicatos coinciden en señalar que la dirección del Metro se ha sentado a la mesa con escasa voluntad negociadora, por lo que no descartan recurrir a medidas de presión como nuevos paros durante el MWC, que se celebrará del 27 de febrero al 2 de marzo.

“No se vislumbra ningún acuerdo y el Congreso Mundial de Móviles está ahí. Si la empresa no pone de su parte, no sabemos qué puede pasar. Ojalá no tengamos que llegar al conflicto pero si lo tenemos que hacer, se hará”, ha dicho a Efe el secretario general de la sección sindical de la UGT en Metro de Barcelona, Carlos González.

González ha lamentado que, entre otros aspectos, las negociaciones estén atascadas en puntos aparentemente poco conflictivos, como la reclamación sindical de que se ofrezcan puestos alternativos a trabajadores con determinados problemas de salud.

El representante de UGT ha subrayado: “nuestro objetivo no es convocar nuevas huelgas, pero si la dirección no da un paso adelante, esa sería una posibilidad”.

CCOO también ha criticado la actitud de “no negociación” de la dirección de Metro y se ha preguntado si “tiene la intención de dilapidar la negociación” y si “nos quieren abocar al enésimo conflicto laboral”, según un comunicado colgado en las redes.

El secretario general de CGT en Metro, Javier del Río, se ha mostrado más optimista respecto a la marcha de las conversaciones, aunque tampoco ha descartado las movilizaciones. “Queda mucho por hablar. Si se sigue negociando no serán necesarias las movilizaciones”, ha apuntado a Efe.

Fuentes de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) han destacado que la dirección de Metro tiene el “máximo interés” en la negociación del nuevo convenio, que se prevé “laboriosa”, ya que se trata de un texto muy amplio.

Cualquier propuesta o avance significativo en el convenio deberá tener el respaldo de la asamblea de trabajadores, que en las últimas ocasiones han llegado a desautorizar a los negociadores pidiendo su dimisión y la del propio comité de empresa.

El Metro de Barcelona cuenta con una plantilla de 3.555 personas y tiene actualmente 274 trabajadores fuera de convenio.