Ninguna puerta cerrada y «todas las vías abiertas». Es el resumen de la reunión que ha mantenido la Junta de Andalucía con Fomento para atar cabos del tranvía. Y es que se van a retomar las comisiones de trabajo en las que se negociaba la posibilidad de que tanto el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) como Renfe fueran los operadores encargados de gestionar el nuevo medio de transporte. El primero, para realizar las labores de seguridad y mantenimiento de la plataforma tranviaria, mientras que la segunda, para gestionar los vehículos.

También se ha llegado a un acuerdo para que los tranvías que se deben homologar aún por las infraestructuras gaditanas, duerman en las cocheras de Jerez durante este periodo de pruebas. Lo que aún queda por determinar es la autorización para utilizar las vías para que lleguen las máquinas, así como los permisos pertinentes para conectar la plataforma tranviaria con las vías hacia Cádiz. «Estamos deseando que el tranvía deje de convertirse en fuente de conflicto para contar noticias buenas sobre el mismo», dijo el delegado provincial de Fomento y Vivienda de la Junta, Manuel Cárdenas.

Entre esos conflictos se encuentran las losas de la calle Real. En este sentido, también habrá reuniones técnicas para abordar el problema. La Junta no se esconde y asume los fallos de ejecución, si bien también expone la necesidad de dar un mejor uso a la calle y regular de la forma adecuada el tráfico. «Hay que buscar la mejor solución para las intersecciones y para el resto de la calle, lo que no vale es que se levanten a los tres meses por una mala utilización», explicó.