Madrid, 18 ene (EFE).- Ante el creciente abandono de tortugas en el jardín acuático de la estación de trenes de Atocha, en Madrid, Adif ha decidido trasladarlas a un centro de naturaleza en Navas del Rey y en el estanque que dejan estos animales prevé instalar un espacio dedicado a la educación ambiental.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha informado en una nota de prensa que unas 300 tortugas serán llevadas al Centro de Fauna y Naturaleza 'José Peña' de dicha localidad madrileña con cuyo Ayuntamiento ha suscrito un acuerdo.

Es la solución que ha hallado Adif para el problema ocasionado por el abandono "creciente" de tortugas en el estanque de la estación del AVE, que originalmente fue diseñado para albergar exclusivamente flora.

Las tortugas, abandonadas por sus propietarios en el estanque, pertenecen en su mayoría a especies catalogadas como exóticas e invasoras, "cuya compra-venta es ilegal", explica Adif.

El administrador de infraestructuras ferroviarias destaca que durante los últimos años se ha encargado de forma voluntaria del cuidado de estas tortugas, dedicando recursos a su cuidado y alimentación, y ha implantado medidas para evitar nuevos abandonos y concienciar sobre esta problemática.

Sin embargo, dice, "los abandonos no han cesado, provocando incluso en algunos momentos la saturación del estanque, que no reúne las condiciones adecuadas para el bienestar de los animales".

En virtud del acuerdo con el Ayuntamiento de Navas del Rey, Adif aporta 50.000 euros para el traslado, reubicación y mantenimiento de las tortugas y el hábitat que las acogerá durante un periodo de cinco años.

El Ayuntamiento cede el espacio que se destinará a los animales en el centro de fauna y se encargará de la ejecución de la construcción de una laguna y el hábitat artificial, y asume el cuidado de la fauna trasladada.

En el lugar donde está ahora el estanque de Atocha, Adif licitará en breve las obras de supresión y posterior pavimentado de un área de 128 metros cuadrados, donde se prevé ubicar un espacio destinado al desarrollo de acciones no comerciales de educación ambiental, sensibilización social y actividades culturales.

Según Adif, este nuevo espacio podría contar con una zona expositiva permanente en la que se refleje la historia del espacio, la problemática medioambiental del abandono de mascotas y la compra-venta ilegal de especies invasoras.

ADIF ya había alertado en 2009 que las tortugas del jardín acuático de Atocha se estaban convirtiendo en "un problema serio" y pedía entonces que no se abandonaran más de estos animales allí. EFE