asun G. Puente | león

Camino de los tres años y medio de su puesta en funcionamiento, el AVE a León no ha alcanzado aún su máxima velocidad, precisamente la principal característica de este tren que puede sobrepasar los 300 kilómetros a la hora. El sistema de seguridad que permite conseguir este tope, el ERTMS, lleva meses instalado en los 162,7 kilómetros de trazado entre Valladolid y la capital leonesa, aunque las obligadas pruebas en los trenes que circulan por esta vía para conseguir la certificación todavía no se han realizado, ni están previstas en el calendario a corto plazo.

Según ha podido conocer este periódico, la falta de maquinistas impide la realización de los testajes. Las pruebas deben ser ejecutadas por el equipo especializado de Renfe con sede en Madrid, integrado por una docena de efectivos, en cuyo calendario de trabajo aún no aparece León.

El AVE que une la capital con Madrid sigue circulando, como desde su puesta en marcha, a una velocidad máxima de 200 kilómetros a la hora en el trazado entre Valladolid y León. El tope que permite el sistema de seguridad con el que cuenta desde hace casi tres años y medio: el Asfa.

Todos los trenes que circulan por la vía de alta velocidad entre las dos ciudades, el 112 (AVE) y los Alvia 121 y 130 deben de realizar al menos 10.000 kilómetros de testajes en los 162,7 kilómetros del trazado. Los viajes en pruebas requerirán una semana como mínimo para cada tren.

En el último año se han jubilado cerca de 600 maquinistas de Renfe, una cifra que aumenta el déficit de profesionales de esta categoría de la compañía, que supera actualmente el millar. La falta de consignación, por el bloqueo de los Presupuestos Generales del Estado para 2019, mantiene bloqueada la convocatoria de nuevas plazas sin fecha, por lo que la falta de maquinistas será una constante a lo largo de los siguientes meses en los distintos servicios de viajeros, mercancías y pruebas.

Los testajes de los equipos de tierra del ERTMS de la vía de alta velocidad a León ya fueron superados con éxito a finales del pasado verano. Se trata de la última fase de la instalación técnica de este sistema de seguridad a lo largo de los 162,7 kilómetros entre la capital de la provincia y Valladolid.

Cuando la alta velocidad a León alcance por fin su máxima capacidad, el tiempo de viaje a Madrid y el trayecto inverso se reducirá en diez minutos. El día en que a línea AVE fue inaugurada, con el primer viaje en tren oficial el 29 de septiembre de 2015, la ministra de Fomento de aquel Fomento, Ana Pastor, anunció que el tren podría lograr su máxima velocidad en el primer semestre del año siguiente, aunque los plazos no se han cumplido.

Su sucesor al frente del departamento, el ministro Íñigo de la Serna, en una visita a León manifestó que el ERTMS estaría en funcionamiento a principios de 2018, fecha que se pospuso al verano y desde entonces nada se ha sabido sobre el calendario de puesta en marcha de este sistema de seguridad del AVE a León. Con el nuevo Gobierno, el responsable de Fomento, José Luis Ábalos, tampoco ha habido anuncios en este sentido. Mientras, León espera maquinistas para probar el sistema ERTMS con los trenes que circulan por la vía de alta velocidad.