Un grupo de grafiteros ha parado este domingo, sobre la 1.20 de la madrugada, un tren de la línea 7 de Metro de Madrid en Hospital del Henares (Coslada) para pintarlo, según han informado fuentes sindicales. Es la cuarta noche consecutiva que ocurre un incidente de estas características. Los grafiteros han pintado unos 18 metros del convoy detenido. El suceso coincide con otro el que esta madrugada ha ocurrido en Barcelona: un grupo de 34 grafiteros asaltó un convoy de metro de la línea 4 hiriendo a tres pasajeros, uno de los cuales era una mujer embarazada.

En la noche de Halloween, del miércoles al jueves de esta semana, unos grafiteros también obligaron a un maquinista de la línea 12 a desviar un tren a una zona con más luminosidad. El trabajador sufrió entonces una crisis de ansiedad. Ese día también pintaron en la estación de Casa de Campo, donde rociaron con pintura a un vigilante de seguridad que grababa su actuación. Hace dos días, una banda de más de 15 grafiteros pintó cinco vagones en la estación de Marqués de Vadillo tras colarse en la cabina de cola del convoy y parar los trenes con la alarma.

El viernes lo hicieron en Las Rosas, donde pintaron 700 metros de vagones situados en el saco de trenes de la estación. Los hechos ocurrieron sobre las diez de la noche en la zona en la que estacionan los trenes. Un grupo de 12 grafiteros accedió al lugar y ensució con aerosoles una gran cantidad de trenes. Como en otras ocasiones, actuaron muy rápido y huyeron precipitadamente del lugar. Esta vez no amenazaron ni agredieron a ningún vigilante.

El Sindicato de Maquinistas y UGT han pedido a la empresa pública que gestiona el suburbano madrileño que aumente la seguridad en las estaciones. También han solicitado cambiar los sistemas de apertura de las cabinas y que los botones de llamadas de emergencia funcionen para garantizar la seguridad de trabajadores y pasajeros. "Hay que tomar medidas para que no entren en las cabinas", ha sostenido el portavoz de UGT en Metro, Teo Piñuelas. Los sindicatos aseguran que el suburbano sacó plazas de técnico de seguridad hace meses y después no les han llamado, por lo que piden que se incorporen "inmediatamente, pues estas últimas bromas pueden costar hasta 30.000 euros".

Fuentes de Metro de Madrid han asegurado que la seguridad del servicio es "una preocupación importante". También han señalado que los sucesos de esta semana han sido trasladados a la Delegación del Gobierno y a instituciones judiciales para valorar qué medidas tomar al respecto, al tiempo que han precisado que la empresa "ha reforzado" en un 20% su presupuesto en seguridad.

El diputado socialista en la Asamblea de Madrid Daniel Viondi ha criticado estos días las acciones de los grafiteros, "que campan a sus anchas por las instalaciones" de Metro. "Otra muestra más de la pésima gestión que tiene la dirección actual". Podemos Transporte Comunidad de Madrid pidió el jueves al consejero delegado de Metro que dimita. La consejera de Transportes de la Comunidad de Madrid, Rosalía Gonzalo, anunció el jueves en su cuenta de Twitter que desde el Gobierno regional "seguirán trabajando para que no se repitan" este tipo de actos.