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21 noviembre 2017
Asturias
La avería de un Alvia obliga a transbordar a un millar de viajeros de siete servicios
Los usuarios de cuatro de las frecuencias completaron el trayecto en bus y tres más en Cercanías. «Es un caos», lamentan los afectados
Llegar o salir de Asturias en ferrocarril requirió ayer redoblar la paciencia. Los pasajeros de cuatro servicios Alvia tuvieron que coger la maleta y echarse al autobús para completar el trayecto entre León y las estaciones de Oviedo y Gijón. Los usuarios de otros tres servicios, además, necesitaron el transbordo a un tren de Cercanías para desplazarse entre las dos mayores ciudades de la región. Los portavoces de Renfe atribuyeron las incidencias a la avería mecánica de un primer convoy y la falta de disponibilidad de material de reemplazo. No hay un registro todavía de cuántos pasajeros resultaron afectados, aunque las fuentes consultadas lo estiman en alrededor de un millar dado el volumen de usuarios que mueven los trenes a Madrid los lunes.
«Esto es un caos; estamos con muchas maletas y necesitamos estar cómodos. Por eso habíamos elegido el tren, pero ahora estamos tirados en la calle», lamentaba Salam, cliente con billete Gijón-Madrid, que viajaba acompañado de su mujer, un hijo pequeño y varios bultos. «Es un desastre y tienen que solucionarlo de mejores maneras», agregaba mientras trataba de arreglarse con el equipaje en la estación de León. «La gente está cansada y no sabe si se puede reclamar o qué», abundaba.
Las incidencias sorprendieron a Patricia por partida doble. Vive en Valladolid, pero por motivos laborales necesitaba ayer estar en Gijón. Para asegurarse los horarios, había optado por el ferrocarril. Todo parecía ir bien pero «al alcanzar Oviedo, nos dijeron que había que bajarse y hacer el resto en un tren de Cercanías que tardó un buen rato». La mujer terminó presentándose en su destino de trabajo con hora y media de retraso. Cuando quiso regresar a la capital pucelana se topó, de nuevo, con problemas. «Me dijeron que tenía que coger un autobús para llegar a León, sin más explicación», indicó. «Me pareció que ya me estaban tomando el pelo, porque dos veces el mismo día...», añadía.
El baile comenzó con el primer servicio programado, el que salió de Sanz Crespo a las 7 horas. La unidad no pudo pasar de Oviedo. Ya en la capital se embarcó al pasaje en autobuses para alcanzar León. Los viajeros que hacían el recorrido inverso tropezaron con el mismo problema. Según detalló Renfe, quienes salieron de Madrid a las 7.05 requirieron de servicios de Cercanías para completar el trayecto entre Oviedo y Gijón. El encaje de bolillos fue prolongándose toda la jornada, siendo el último afectado el tren que salía de Sanz Crespo a las 18.00. En él debía ir Nuria Vallego, que como los demás, se tuvo que subir al autobús a León. «No me han dicho si hay compensación ni nada», comentaba. «Compré billete de tren para poder leer; en el bus voy incómoda. Como igual no hay retraso tampoco nos compensan», comentaba una mujer a su lado.
