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21 mayo 2015

La avería en el centro de control de Adif afecta a 80.000 personas

El pasado mes de abril sufrió dos incidencias que también dejaron sin servicio a toda la red

 Barcelona 21 MAY 2015 - 10:53 CEST

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Pasajeros en la estación de Sants de Barcelona. / ALBERT GARCIA

La normalidad ha regresado pasadas las nueve de la mañana a la estación de Sants de Barcelona, aunque los trenes de la red de Rodalies de Renfe mantienen retrasos que no se habrán solventado hasta las doce del mediodía. La avería informática que ha afectado al centro de control de tráfico centralizado de los trenes de corta y media distancia, que depende de Adif, ha acabado afectando la circulación de 200 convoyes y alrededor de 80.000 pasajeros entre las 6.15 y las 8.00, según ha explicado Félix Martín, director de Rodalies de Catalunya.

La megafonía de la principal estación de Barcelona advierte de que los trenes pueden circular todavía con retrasos superiores a los 30 minutos, si bien los pasajeros podrían no notar esa afectación gracias al efecto frecuencia. Esas demoras han superado los tres cuartos de hora en el peor momento de la incidencia, en plena hora punta.

El colapso del centro de control ha provocado que los sistemas de comunicación se quedaran sin funcionar en toda la red, con lo que la mayor parte de los semáforos que dan pasos en las vías se han quedado en rojo. Tras diferentes intentos de reiniciar el programa que controla toda la red, el problema se ha dado por solucionado a las ocho de la mañana, si bien la normalidad en las estaciones no se ha recuperado hasta casi una hora después.

Martín ha señalado que el primer objetivo es el de recuperar la circulación y el servicio para los pasajeros y que después Renfe reclamará a Adif "en los foros adecuados" responsabilidades por el problema en el corazón informático de la red. No es la primera vez que el centro de control se ve afectado por este tipo de averías. El pasado mes de abril sufrió dos incidencias que también dejaron sin servicio a toda la red, uno por un problema de software como el de hoy y otro por una avería eléctrica.

El enésimo problema en Rodalies ha provocado el enojo del consejero de Territorio, Santi Vila, que ha explicado a RAC1 que ha llamado al presidente de Adif y a la ministra de Fomento, Ana Pastor, para denunciar la avería. "Somos clientes y Renfe no puede prestar el servicio, es inadmisible", ha señalado en un ataque directo a Adif, la empresa pública encargada de la gestión de la infraestructura ferroviaria.

Fruto de lo problemas que está provocando la avería, la megafonía de la estación de Sants además de advertir de los retrasos también avisa a los pasajeros que se fijen en los rótulos electrónicos de los propios trenes para asegurarse de que se dirigen a sus destinos.

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