Cámara de Cuentas, Tribunal de Cuentas, Fiscalía, Congreso y un juzgado analizan las cuentas de una obra que se disparó en más de 40 millones de lo presupuestado.

Pedro Blasco

El tranvía de Parla, el gran escaparate de Tomás Gómez, se ha convertido en un dolor permanente para el secretario general del Partido Socialista de Madrid. Algunos socialistas afirman, ya sin reparo, que puede ser la tumba del secretario del PSM.

El tranvía de Tomás Gómez ha tenido abiertas hasta cinco investigaciones a causa del aumento de los costes de una obra que ha ocasionado problemas a sus promotores desde el primer día. El PSM dice que todas se archivan. Las cuentas del tranvía las investiga la Cámara de Cuentas, el Tribunal de Cuentas, el Congreso de los Diputados e incluso la UDEF, tras la petición de la Fiscalía. También hay un procedimiento en un tribunal de lo contencioso-administrativo.

El Ayuntamiento de Parla (128.000 habitantes) adjudicó el tranvía en mayo de 2005 por un total de 103 millones de euros (93 millones más el IVA). Acciona, FCC, Detren y Caja Castilla-La Mancha se pusieron manos a la obra para construir y mantener la infraestructura. La obra se fue hasta los 142 millones de euros. El PP de Parla calcula que el coste total, con los intereses del préstamo, se eleva a 256 millones de euros que tendrán que pagar hasta el año 2037.

Parla adjudicó el tranvía en mayo de 2005 por 103 millones y la obra se fue hasta los 142 

El precio de construcción se disparó y se inauguró con un coste de más 40 millones de euros sobre lo presupuestado. De este aumento se pagaron 25 millones de euros en tiempos de Tomás Gómez, aunque el entonces alcalde no estuvo en la comisión de Gobierno donde se dio el visto bueno al “modificado”.

El resto se aprobó cuando ya era el alcalde su sucesor, José María Fraile, recientemente detenido por su presunta implicación en la Operación Púnica. Ahora, la Fiscalía ha solicitado que se impute a los dos gobiernos municipales por el aumento del coste.

Una de las curiosidades es que el inicio de las investigaciones se ha llevado a cabo con el apoyo de consejeros socialistas de los órganos fiscalizadores, algo poco habitual. En el caso de la Cámara de Cuentas, órgano fiscalizador de la Comunidad de Madrid, los dos representantes socialistas Emilio García Horcajo y Ángel del Castillo, votaron a favor del programa de fiscalización, que incluía el tranvía de Parla. Posteriormente, Gómez colocó a dos personas de su confianza en el tribunal para sustituir a García Horcajo y Ángel Castillo.

La Cámara de Cuentas envió el informe al Tribunal de Cuentas, que fue el que lo trasladó a la Fiscalía de Madrid para que estudiara si había infracción penal. Ahora, la Fiscalía ha pedido la imputación de los equipos de Gobierno por irregularidades en la aprobación de los presupuestos.

Gómez acusó al actual presidente de la Cámara, Arturo Canalda, de haber sido el culpable de la realización de ese informe. La realidad es que fue en enero de 2012 cuando se acordó hacer el estudio y hasta junio de ese año Arturo Canalda no fue nombrado presidente del órgano fiscalizador.

Una de las curiosidades es que el inicio de las investigaciones se ha llevado a cabo con el apoyo de consejeros socialistas

Además de esta investigación, la sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas consideró que había responsabilidades contables en la gestión de las obras y abrió un procedimiento de reintegro por alcance. Curiosamente, Felipe Ortiz, cercano al PSOE, presidente de la Sala de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas lo envió a la sección II del tribunal que está presidida por Margarita Mariscal de Gante, antigua ministra del PP, que estudia en la actualidad si hay responsabilidades contables en el procedimiento.

En el Congreso

Por otra parte, el Grupo Parlamentario Popular en el Congreso pidió el año pasado a la Comisión Mixta Congreso Senado que solicite al Tribunal de Cuentas la elaboración de un informe de fiscalización de los tranvías de Jaén, Vélez-Málaga, Parla (Madrid) y Zaragoza. Parece que de ese informe no va a salir nada bueno para los promotores y gestores de esa obra de Parla.

También hay una denuncia del PP de Parla en la vía contencioso administrativa por el sobrecoste de más de 40 millones de euros en las obras y “por hacer esa adjudicación sin tener en cuenta las leyes vigentes”.

La respuesta de Gómez

Los socialistas han contestado a la presentación de la denuncia de la Fiscalía afirmando que el tranvía fue una obra que sacó a concurso, licitó, adjudicó y contrató el Consorcio Regional de Transportes, que gobierna el PP. “En la mesa de contratación no hubo ninguna representación del Ayuntamiento de Parla”, añaden.

Recuerdan que la actual secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, fue consejera de Transportes durante la época de adjudicación. Añaden que todos los procedimientos han sido archivados hasta la fecha. El PSM considera que todo es fruto de una campaña de acoso orquestada desde hace meses por el PP “ante la inmediatez de unas elecciones clave para la derecha en Madrid y en toda España”.

El problemas en el PSOE

El asunto del tranvía de Parla está provocando que dentro del PSOE se crea que Tomás Gómez no sea el mejor candidato para las elecciones autonómicas del próximo mayo. Sin embargo, al igual que en el caso de Pedro Sánchez, no se ha producido ninguna declaración pública contra Tomás Gómez que no sea de personas que no lograron los avales para presentarse a las primarias.

Pero en privado, los socialistas ya hablan de que si Gómez se retira el candidato podría ser Ángel Gabilondo, que fue ministro de Educación con José Luis Rodríguez Zapatero. En público todo son declaraciones de apoyo al actual secretario general del PSM. En privado, las cosas cambian y la opinión es que la situación es crítica. Ven a Gómez tocado, encerrado con un pequeño grupo de diputados y alejado de muchos de sus apoyos clásicos.