El coordinador del sector ferroviario de CCOO de Salamanca explica a Salamancartvaldía los motivos de las recientes movilizaciones del sector

Ángel Hernández, Coordinaro del sector ferroviario de CCOO en Salamanca.

La huelga acontecida el pasado 31 de julio, por parte de Renfe y convocada por CCOO, así como por otros sindicatos minoritarios, y que fue llevada a cabo ese mismo día y el 1 de agosto por Adif, tiene sus motivos en temas que vienen desde hace tiempo, ya que a principios de año se firmó un acuerdo de garantías que no se ha cumplido, afirma Ángel Hernández.

El acuerdo de garantías buscaba que el trabajo tuviese que ser realizado por trabajadores de las dos empresas, sin tener que recurrir a empresas externas, ya que, tras la liberalización de las empresas, las infraestructuras que mantienen son susceptibles de la entrada de entidades privadas. Un acuerdo que no asegura con garantías el sector del ferrocarril en el futuro, ya que no se ha cumplido tras su firma. Algunos de los motivos de la huelga han sido el mantenimiento y la creación de empleo, para garantizar el futuro del sector, el compromiso por parte de Renfe, ADIF y el Ministerio de que, entre las distintas empresas de Renfe, contraten entre ellas, así como el rechazo al cierre de base de mantenimiento e infraestructuras en toda España.

El coordinador del sector ferroviario de CCOO de Salamanca, comenta que "hasta el  último momento se hicieron propuestas para solucionar el problema, pero no fueron atendidas por parte de Renfe ni de ADIF".

El seguimiento de la huelga estuvo marcado por los servicios mínimos, tal como comenta Ángel Hernández, "los servicios mínimos han sido más que abusivos, sólo se han suprimido cuatro trenes, por lo que la posibilidad de hacer huelga se ha visto reducida", además se ha llevado a cabo una denuncia por la implantación unilateral de servicios mínimos que se ha producido. Además, en contra de lo que mucha gente piensa, el daño al usuario ha intentado ser el mínimo, ya que "no es un conflicto con el ciudadano", además, las fechas que aparentemente parecen ser de días claves, en el caso de Renfe no es así, ya que durante el mes de julio hay 10 días con mayor ocupación que el 31.

En el caso de la ciudad de Salamanca, que cuenta con cerca de 200 trabajadores, ADIF ha abierto un proceso de trabajadores excedentes, empezando por 21 trabajadores, pero al final han acabado con 15, entre los que se encuentran el total de empleados de los servicios logísticos, y personal de taquilla. Dichos trabajadores, "se encuentran obligados a participar de manera voluntaria a un proceso de movilidad y en Salamanca no hay vacantes", por lo que debería trasladarse a otras ciudades.