Pola de Lena,
C. M. BASTEIRO
Los viajeros de la línea ferroviaria de Renfe en la comarca del Caudal tienen un cabreo como para parar un tren. La noticia de la supresión del convoy regional entre Gijón y León ha caído como un jarro de agua fría entre los usuarios del servicio. La mayoría de los viajeros aseguran, no obstante, que utilizan esta línea para trayectos dentro de la región, por el ahorro de tiempo en los viajes, ya que el tren realiza menos paradas, o porque coincide mejor con el horario del trabajo o los estudios.

«Si quitan esta línea me quedaré tirado los miércoles cuando salga de clase». Así de rotundo se mostró Rubén Calzadillo, un estudiante de Telecomunicaciones que utiliza el servicio algunos días para viajar desde La Pereda hasta Ujo y después subirse a otro tren hasta Gijón. Con la supresión del servicio regional entre Gijón y León, este estudiante de 22 años tendrá que buscar otra fórmula para poder llegar hasta su casa.

Todo apunta a que tendrá que cambiar de medio de transporte o resignarse a esperar en la estación. El tren de media distancia entre Gijón y León llevaba años bajo amenaza de desaparición pero ahora, el Ministerio de Fomento lo ha incluido oficialmente en la lista de servicios a suprimir el próximo año. Fomento alega la baja ocupación del convoy como principal criterio para acordar esta medida. Según el Gobierno central, 31.231 viajeros utilizaron la línea el año pasado.

Las cifras son cifras, pero detrás siempre hay personas. El servicio es una de las principales vías de comunicación para los vecinos de la zona rural del entorno de Pajares y ellos serán, a juicio del lenense León Blanco, los principales perjudicados. «En Pola de Lena tenemos más líneas, pero la gente de los pueblos lo va a notar mucho», señaló el joven, poco antes de subirse a un convoy en la principal estación ferroviaria de la capital de Lena.

Muchos usuarios de la comarca utilizan la línea regional para acortar el viaje hasta Gijón. Es el caso de Germán Mayora, un lenense que reconoce que no suele utilizar el tren pero que siempre es su medio de transporte para acercarse a León. En el caso de utilizarlo para moverse por Asturias, siempre busca los horarios para poder aprovechar el viaje del convoy regional. «Es más rápido, reduce el tiempo de viaje a Gijón en cerca de veinte minutos», señaló Mayora.

Un tren de cercanías hace el trayecto entre Pola de Lena y Gijón en una hora y cuarto. En el regional, con menos paradas, el tiempo de viaje no llega a una hora. El número de usuarios de la comarca en este convoy aumenta con la llegada del verano. «Muchas familias, en especial con críos pequeños, escogen este tren también para acortar el viaje para ir a la playa los domingos de verano», añadió Germán Mayora.

Los excursionistas tendrán que adaptarse pero los más afectados, sin duda, serán los que necesitan el servicio diariamente para ir al trabajo, como Elena Sánchez, una vecina de Ujo que viaja por razones laborales a Gijón. Fomento baraja como alternativa impulsar los servicios de largo recorrido entre Asturias y Madrid. Esta línea tiene menos paradas, por lo que muchos vecinos seguirán perdiendo el tren.