ARABA/ÁLAVA

Llodio reclama a Renfe que mejore los accesos a la estación

El Ayuntamiento solicita que también se coloque una marquesina en el andén hacia Bilbao

Todos los partidos con representación en el Ayuntamiento de Llodio han reclamado a Adif, la empresa que gestiona las infraestructuras ferroviarias de Renfe, la puesta en marcha de medidas para adecuar la estación «en Laudio en la entrada principal y del apeadero de Santa Cruz y su entorno».

La mejora es imprescindible, según los grupos municipales, porque «Renfe tiene un compromiso firme para facilitar la accesibilidad universal a sus clientes». De hecho, los dos ascensores que ha colocado la empresa ferroviaria entre los andenes de la estación no hacen más que resolver parcialmente el problema, porque la entrada principal de las instalaciones sigue siendo inaccesible. Sin embargo, el Ayuntamiento ha previsto la reforma de la plaza de la estación para construir una rampa de acceso a la parada de trenes cuando se ejecuten las obras solicitadas al Plan Foral de Obras y Servicios para remodelar el paso bajo la vía.

En el caso del apeadero de Santa Cruz, se han mantenido ya varias reuniones entre el Ayuntamiento y los responsables de Adif sin que de momento se haya materializado un acuerdo concreto para resolver el mal estado de la estación y sus alrededores.

Los vecinos han pedido en todas las asambleas de barrio celebradas en los últimos años, la ampliación del puente que pasa por encima de las vías, el arreglo de las escaleras que dan acceso al andén y la creación de un paso para que los viajeros puedan entrar en el polígono industrial de Santa Cruz.

La mejora del servicio ferroviario en Llodio incluye, asimismo, según la moción que han aprobado todos los grupos, la colocación de una marquesina «en el andén dirección Bilbao para facilitar la espera a los usuarios». El mobiliario urbano permitirá a los viajeros resguardarse del mal tiempo mientras esperan al tren una vez sobrepasadas las canceledoras. Precisamente, son estas máquinas las que han limitado la capacidad del 'hall' de la estación y obligan a los usuarios a esperar al tren en el andén, que no tiene ningún tipo de resguardo.