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9 enero 2018

TRANSPORTE PÚBLICO

El tranvía bate récords de viajeros sin noticias de la conexión por la Diagonal

El Tram cerró el 2017 con un millón de validaciones más que en el 2016

Carlos Márquez Daniel Barcelona - Lunes, 08/01/2018 | Actualizado a las 20:33 CET

 

El tranvía de la Diagonal.

 

El tranvía de la Diagonal. / FERRAN NADEU

El tranvía metropolitano de Barcelona batió su récord de viajeros en el 2017 tras rozar los 28 millones de validaciones entre enero y diciembre, un millón más que el año anterior, lo que supone un incremento del 4,26%

Las líneas del Trambesòs (T4, T5 y T6) son las que más han crecido -un 6,56%- hasta alcanzar los 9,7 millones de viajes. El Trambaix (T1, T2 y T3) también han incrementado el número de usuarios -un 3,08%-, lo que ha permitido sumar a la red otros 18,2 millones de validaciones. Desde su inicio en el 2004, el Tram, que dispone de 56 estaciones, ha transportado a más de 305,6 millones de personas, con una tendencia de crecimiento siempre al alza, salvo en los años 2010 y 2012, en los que, seguramente a consecuencia de la crisis y de la bajada del empleo, se registró un cierto estancamiento.

Estas cifras se unen a las ya avanzadas la pasada semana por este diario sobre el uso del metro y el bus. El subterráneo batió en el 2017 su récord al superar por primera vez los 390 millones de validaciones. Por su parte, los autobuses de TMB marcaron los mejores números de los últimos 10 años. 

Comisión en marcha

Mientra el tranvía no deja de crecer, el Ayuntamiento de Barcelona sigue deshojando la margarita sobre la unión de ambos recorridos, interrumpidos por una Diagonal por la que el gobierno de Ada Colau ha decidido no colocar ninguna de las líneas de la nueva red de autobuses. A saber: esos 28 recorridos horizontales, verticales y diagonales que vienen a arreglar la alambicada malla heredada de la anterior era de los tranvías, que vivió su ocaso a principios de los años 70. 

El diseño de Colau para el tranvía por la Diagonal. 

El consistorio tiene en marcha una comisión municipal destinada a decidir cuál es la mejor manera de conectar ambas líneas. Barcelona en Comú defiende, como hiciera el PSC en su etapa al frente del ayuntamiento, que la mejor opción es la Diagonal. Este diseño trae bajo el brazo el aval de los técnicos. Pero no el político. Y de ahí que la cosa siga parada, ya que para desatascar el dinero que debe permitir colocar más vías en terreno urbano, hace falta mayoría en el pleno. Para ello, Colau debe sumar al menos 10 concejales a los 11 de su bancada. Complicada empresa. Más aún si se tiene en cuenta que las elecciones municipales están cerca, a poco más de un año. 

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