elEconomista.es

15 octubre 2014

Fomento destinará el pedido de los AVE a Renfe Viajeros e ignora la filial de alquiler

Miguel Ángel Gavira (Madrid)

 

ave

Locomotora de un tren AVE.

 

El mayor pedido de trenes de los últimos diez años irá a parar íntegramente a Renfe Viajeros. Según explican fuentes solventes conocedoras del proceso, de las 40 unidades que comprará el operador ferroviario por un importe que podría superar los 1.000 millones de euros (30 AVEs y 10 trenes de velocidad alta con ancho variable) ninguna irá a parar a Renfe Alquiler de Material Ferroviario.

 

Las mismas fuentes añaden que esta filial de alquiler irá recibiendo paulatinamente los trenes de la flota de Renfe Operadora más antigua a medida que se incorporen los nuevos y en función de las necesidades del operador público.

Este periódico se ha puesto en contacto con varios candidatos privados que quieren explotar el Corredor de Levante y todos ellos muestran su desacuerdo con la decisión, que les impediría alquilar una flota moderna en el futuro a través de esta sociedad de reciente creación.

A Renfe Alquiler de Material Ferroviario se le asignó en el momento de su creación 7 trenes de alta velocidad de la Serie 100 (fabricados por Alstom); 12 trenes eléctricos de la serie 120, de ancho variable; 10 trenes eléctricos de la serie 490; 5 trenes diesel de la serie 598, 17 trenes diesel de la serie 592; 18 remolques Talgo de la serie 4; 37 locomotoras eléctricas de la serie 269; 8 locomotoras diesel de la serie 333; 4 locomotoras diesel de la serie 319 y 1.173 vagones.

 

Sigue prestando el material

 

Hasta la fecha, Renfe Alquiler de Material Ferroviario continúa prestando su material a Renfe Operadora con el compromiso de cesar su actividad en el momento real en el que entre en escena la liberalización, según explicaba en el mes de noviembre del año 2013 el expresidente de Renfe, Julio Gómez Pomar, en una comparecencia en la Comisión del Congreso de los Diputados.

Sobre el papel, el Ministerio de Fomento creó esta sociedad para ayudar en un primer momento al operador privado que se adjudique el Corredor de Levante, hasta que le de tiempo a encargar trenes nuevos para la línea o a alquilarlos a una empresa de leasing.

En teoría, en las condiciones que se publicarán en breve en la Orden Ministerial que marcará las pautas de esta liberalización del mercado no se incluye la obligación de que el candidato alquile los trenes a la nueva sociedad de Renfe, pero la mayoría de los operadores privados que se han interesado por este proyecto confirman a elEconomista que la opción más lógica y rentable en un primer momento es aceptar la flota de los siete trenes AVE S-100 y los 12 trenes eléctricos de la serie 120 que se han traspasado a Renfe Alquiler de Material Ferroviario.

Tras más de una década sin grandes pedidos, los cinco grandes que históricamente han suministrado material al operador público ferroviario no quieren faltar a la cita, que se licitará el próximo ejercicio. Los más ansiosos por conocer las características del contrato son los dos fabricantes españoles -Talgo y CAF-, que tienen en puertas sus dos grandes proyectos en espera de un gran contrato de alta velocidad que los consolide.

 

Oportunidad española

 

El fabricante con sede central en Las Rozas (Madrid), trabaja desde hace varios años en su joya de la corona: el Avril. Se trata de un tren de alta velocidad que evoluciona tecnológicamente desde el actual Talgo 350 y que juega sus bazas con la gran capacidad de pasajeros hasta las 600 plazas gracias a la nueva configuración de asientos (3+2), que supera las dos plazas por pasillo de los trenes actuales.

El otro grupo español, el fabricante vasco CAF, se quiere presentar con el Oaris, una apuesta revolucionaria de la compañía, que hasta la fecha se había especializado con un gran éxito en el mercado de exportación en los segmentos de metros, trenes de media distancia y velocidad alta.






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