• DESCARGABLEEl escrito de la diputada María Teresa Gómez-Limón para el Grupo Popular
• DESCARGABLEComunicado del Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Madrid

María Alejandra Torres / José Marcos Madrid 3 SEP 2014 - 10:12 CEST

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La diputada María Teresa Gómez-Limón. / Luis Sevillano

María Teresa Gómez-Limón, diputada del PP en la Asamblea de Madrid, ha presentado su "baja definitiva" del partido y del Grupo Parlamentario Popular. Así lo ha comunicado este miércoles a través de una carta enviada al presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, y de un escrito registrado en la Mesa de la Cámara. Gómez-Limón, que pasará a ser diputada no adscrita, asegura que abandona la formación —no el escaño— por la "ausencia total de democracia", la "falta de transparencia" respecto a la percepción de sobresueldos y el uso de fondos públicos, y la situación de "aislamiento y desprecio" que asegura haber sufrido por cuestionar las posturas oficiales.

"Lo único que he pedido es que la democracia sea digna de tal nombre. El PP es un sitio donde no puedes discrepar, y por ello te insultan y te retiran el saludo. Ya no me siento identificada con el partido", ha asegurado Gómez-Limón a EL PAÍS. La diputada se vinculó a la formación en 2005 cuando, como presidenta del Centro Democrático y Social (CDS), su grupo decidió respaldar al PP. La número 85 en el escalafón ocupa el escaño que Esperanza Aguirre dejó vacante en la Asamblea de Madrid en septiembre de 2012. Ser parte de la bancada, sin embargo, no le ha impedido criticar públicamente al partido y al Gobierno. Desde la Asamblea ya ha espoleado al PP contra la corrupción, por ejemplo, por el caso Bárcenas.

En enero pasado le había enviado una carta al presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, en la que le pedía el listado de los cargos y empleados que han recibido sobresueldos. "No le acusaba de nada; solo le pedía explicaciones, pero jamás me contestó. Me llamaron desleal, me llamaron de todo, y me quitaron el saludo", cuenta ahora Gómez-Limón.

Uno de los temas por los que más ha cuestionado al Gobierno ha sido el accidente del tren de Santiago de Compostela. La diputada, que viajaba en los primeros vagones del Alvia que descarriló el 24 de julio de 2013, ha criticado el manejo de la investigación. Gómez-Limón asegura que, desde que pidió el "cese inmediato" de los máximos responsables de Adif y Renfe por sus "responsabilidades civiles y políticas", el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ya no le habla. "Me ve y no me saluda. Estaba en silla de ruedas, con yeso, con collarín, con ataques de pánico, y me llamaron para decirme que no podía hablar así. Desde que regresé a la Asamblea, muchos no me han dicho ni hola".

Gómez-Limón asegura que decidió abandonar el grupo después de que, según ella, no le dejaran entrar a la ceremonia de entrega de medallas que la Xunta había organizado para las víctimas por el primer aniversario del accidente. "Iba con otras víctimas y no solo no nos dejaron pasar. Nos mandaron a los antidisturbios. Nos trataron como a terroristas". Su grupo —más crítico y uniformado con camisetas con mensajes en favor de una comisión de investigación— protestó a la puerta del acto y, más temprano, en la plaza del Obradoiro.

La diputada cuestiona la ausencia de debates internos y la "obligación de no poder votar con libertad". Por ello, dice sentirse "engañada" por decisiones políticas adoptadas por el Gobierno que, según ella, no estaban contempladas en el programa electoral. "El presidente ha incumplido el 60% del programa nacional; me lo he mirado punto por punto. En el programa todo es estupendo, pero no se hablaba de recortes, de quitar personal en educación, de recortar en sanidad. En esa carta le digo que hay cosas que no cuestan ni un solo euro, por ejemplo, que el Consejo General del Poder Judicial sea más independiente. Eso es gratis", ha asegurado la parlamentaria.

El PP dice que debería dejar el escaño

"Respetamos su decisión, responde a cuestiones personales por una situación trágica, derivada de un trágico accidente", ha justificado el portavoz de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, achacando la renuncia de la parlamentaria al accidente del Alvia en Santiago de Compostela. Gómez-Limón estuvo hospitalizada en A Coruña.

El Grupo Parlamentario ha añadido, sin embargo, que, por "una cuestión de coherencia, la diputada debería entregar el acta que logró bajo las siglas del Partido Popular". Gómez-Limón asegura que no dejará el escaño porque no tiene nada que ocultar y no quiere "salir por la puerta de atrás, como otros que se han ido por tener dinero en Suiza", en alusión a Francisco Granados. De acuerdo con el artículo 43 del Reglamento de la Cámara Regional, pasará a ser diputada no adscrita, ya que el Grupo Mixto solo puede constituirse al inicio de la legislatura.

La formación ha subrayado "la igualdad de trato a todos sus miembros". Íñigo Henríquez de Luna, portavoz del Grupo Popular, ha asegurado que la diputada "ha sido siempre puntualmente informada" de la actividad en la Asamblea y que ha participado en las reuniones semanales. "Se le ha dado la posibilidad de expresar sus opiniones en dichos foros y nunca ha sido sancionada por hacerlo". El grupo recuerda que, por iniciativa del PP, fue designada secretaria de la Comisión de Mujer y miembro de las comisiones de Presidencia y Justicia y Asuntos Sociales.

En el escrito que registró en la Asamblea, Gómez-Limón ha pedido seguir formando parte de la Comisión de Asuntos Sociales, mantener su despacho y su actividad parlamentaria. En el documento renuncia al aforamiento porque "los españoles son iguales ante la ley".