¿Quién no recuerda esa escena de ‘La Piedra Filosofal’ en la que Hermione llega al compartimento de Harry y Ron para demostrar desde el principio que su origen muggle no le impedirá ser la maga más resolutiva del grupo? Ahora, gracias a West Coast Trail tú también podras sentirte como los alumnos de Hogwarts. The Jacobite, el tren de Harry Potter, comienza sus rutas en marzo del 2018 y los billetes ya están a la venta.

Si eres fan de Harry Potter no puedes perderte esta experiencia mágica. No solo viajarás en el tren de vapor que aparece en las películas, sino que también haras el mismo recorrido que Harry, Ron y Hermione, exceptuando su destino, que no es Hogwarts, pero también es muy especial. El puerto pesquero de Mallaig se fundó durante la década de 1840 y al llegar tendrás una hora y media para disfrutar de una caminata por este pequeño pueblo.

El primer viaje a bordo del Hogwarts Express se realizará el próximo 30 marzo

El apasionante recorrido de 135 km partirá de Fort William, cerca de la montaña más alta de Gran Bretaña, Ben Nevis. Visitarás la estación ferroviaria más occidental de Gran Bretaña, Arisaig, pasarás cerca del lago más profundo de agua dulce en Gran Bretaña, Loch Morar; y el río más corto de Gran Bretaña, el río Morar, llegando finalmente al lago más profundo de Europa, Loch Nevis.

En este viaje lo importante no es la llegada, sino la experiencia del viaje, por eso se considera uno de los mejores recorridos en tren del mundo. Podrás cruzar el viaducto de Glenfinnan con 21 arcos, en el que en ‘la Camara Secreta’ Harry y Ron casi son arrollados por el Hogwarts Express, después de haber robado el coche del Señor Weasley. El tren puede detenerse en el viaducto, si el tiempo lo permite, para que puedas disfrutar de la magnífica vista del lago y sacar fotografías para inmortalizar uno de los lugares más característicos de las películas.

Los precios de esta mágica experiencia van desde £18 para niños a £30 para adultos y lo mejor es comprarlos en clase turista, porque es la que permite viajar en los compartimentos en los que Harry y Ron comían grajeas de todos los sabores mientras Hermione buscaba el sapo de Neville.