LaVozdeGalicia.es
14 diciembre 2015
Fomento quiere usar las piedras de la antigua estación de tren al construir la futura terminal
El ministerio se lo planteará a la empresa que gane el concurso
vigo / la voz, 13 de diciembre de 2015. Actualizado a las 05:00 h.
No es un tema prioritario para Fomento, pero el ministerio quiere que no se pierdan las piedras de la vieja estación de tren de la calle Urzaiz, que fue desmontada hace más de 15 años. Un portavoz del departamento han confirmado a este periódico que van a ser ofrecidas a la empresa que reciba la adjudicación para construir la estación diseñada por el arquitecto norteamericanoThom Mayne. Por tanto, para saber si habrá un destino definitivo para el inmueble histórico habrá que esperar al desenlace del concurso convocado en noviembre.
El primer intento de construir el edificio de Mayne, pilotado por el PSOE hace cuatro años, en plena crisis económica, fracasó. Tras quedar desierto, llegó el PP al Gobierno y mantuvo el proyecto en el cajón hasta semanas antes de las elecciones del 20-D.
Lo que plantea Fomento no es una obligación para el adjudicatario. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), planteará esta opción a la empresa ganadora para que utilice estas piedras en el futuro inmueble. Por tanto, todo queda abierto y mientras seguirán tiradas en el aparcamiento de la estación de Redondela.
Previsiblemente, Mayne tendrá algo que decir como autor del proyecto. El edificio fue diseñado hace cinco años y ahora, con el concurso convocado, Fomento sugiere que se incluyan las piedras del viejo edificio de finales del siglo XIX.
La iniciativa se conoce días después de que los grupos municipales hayan sugerido otros usos. Concretamente, PP y Marea propusieron la recuperación del edificio mediante su reconstrucción en uno de los barrios o parroquias de la ciudad reconvertirlo en centro social. El gobierno socialista no quiso pronunciarse al respecto, aunque el alcalde consideró «un error inmenso» desmontar el edificio hace tres décadas sin darle un destino.
En su momento, los gobiernos locales de finales de los 90 barajaron distintas opciones, pero ninguna cuajó. Por ello, cuando hubo que retirarlo para construir la estación antecesora de la actual se decidió trasladar las piedras numeradas a Redondela. El cuidado que se puso en esta operación contrasta con el abandono posterior de un inmueble catalogado como BIC (bien de interés cultural). En estos años no se han vigilado las piedras y nadie cuida que no sufran daños. ADIF se ha olvidado de ellas pero tampoco desde Vigo se ha requerido a Fomento una solución durante esta larga etapa de olvido.
Si alguna empresa oferta la construcción del edificio que coronará la estación del AVE tendrá que realizar una inversión entre 83 y 152 millones de euros, aunque una parte correrá a cargo de la sociedad pública Vialia. En el primer caso, la opción más barata, el futuro complejo de servicios, tendrá 90.000 metros destinados a centro comercial con tiendas, oferta de ocio y aparcamiento. Si el proyecto despierta mayor interés podría llegar a los 120.000 metros construidos.
En cualquiera de los dos casos, la inversión quedará por debajo de los 180 millones de euros previstos en el proyecto inicial de Thom Mayne, que forzosamente habrá que recortar. Aquella convocatoria quedó desierta y ahora tampoco es descartable que pase lo mismo. Solo así se explica que Fomento haya esperado a la celebración de elecciones para convocar el concurso. Pase lo que pase, se conocerá semanas después del 20 de diciembre.
