Un tren de cercanías que viajaba a gran velocidad ha causado la muerte de al menos 50 personas tras haber arrollado a más de 100 en el noroeste de India, según ha informado un portavoz de la policía de la región de Punjab y varios testigos. En el momento del suceso, los fallecidos se encontraban sobre las vías y en las inmediaciones mientras asistían a una tradicional festividad hindú en la que se queman efigies y se detonan petardos, ha declarado un policía a la agencia Reuters.

Unas 60 personas han sido trasladadas al hospital con heridas, tras un suceso que el policía en la sala de control del tráfico ferroviario ha calificado como "accidente extraño", debido a que los asistentes a la festividad parecen no haber percibido que el tren se aproximaba.

Amarinder Singh, ministro principal de Punjab, ha señalado que se dirigía a la ciudad de Amritsar, donde se ha producido la tragedia, para supervisar las labores de rescate y acompañar a los familiares de las víctimas. "Hemos solicitado una investigación que establezca por qué se ha producido este accidente", ha comentado a la agencia de noticias india ANI.

El primer ministro indio, Narendra Modi, ha comentado que se encontraba "extremadamente triste" por el accidente. En un tuit, Modi ha comentado: "Mis mayores condolencias a las familias y a aquellos que han perdido a sus seres queridos. Rezo por que aquellos que han sobrevivido se recuperen pronto. He pedido a los servicios de emergencia que proporcionen la asistencia requerida de forma inmediata".

Las televisiones locales han mostrado imágenes de enfado de varias personas de la ciudad, entre ellas la de la madre de una de las personas fallecidas. Un testigo ha declarado a la televisión de noticias india Times Now que los familiares de algunos de los fallecidos estaban recogiendo sus cuerpos por su cuenta y han lamentado que las labores de emergencia actualmente en marcha no se estaban realizando correctamente. "Ni siquiera hay suficiente luz", ha denunciado a un canal local una persona que se encontraba en el lugar del accidente.

Los ferrocarriles estatales indios, en su mayoría construidos durante el dominio colonial británico, cuentan con un historial de seguridad preocupante, después de décadas de infrafinanciación. Las políticas llevadas a cabo por los Ejecutivos indios han preferido mantener precios bajos que garanticen la movilidad de unos 23 millones de ciudadanos antes que encarecer el servicio para contar con fondos suficientes que permitan una mejora en el sistema ferroviario.