El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) acaba de aportar al Juzgado de Instrucción número 2 de O Porriño la información que le solicitó la jueza, que pretendía averiguar, entre otros asuntos, las razones que motivaron que el tren Celta fuera conducido a una vía desviada con un límite de velocidad de 30 por hora, cuando habitualmente el tren internacional circula por la estación de O Porriño a una velocidad máxima de 120 km/h, pues no tiene parada en esa localidad. El convoy finalmente descarriló a 118 por hora, después de acelerar en los últimos instantes en lugar de frenar, lo que provocó el descarrilamiento, la muerte de cuatro personas y medio centenar de heridos.

Según ha podido saber La Voz, el ADIF admite en esos documentos que desde el centro de control se ordenó que el tren circulase por vía desviada para comprobar si se había solventado una incidencia detectada el día anterior, consistente en que el sistema no detectaba la presencia de un tren en el cantón, las vías protegidas por la señalización del desvío y sus instalaciones asociadas. Esto podía generar un riesgo evidente de colisión, al no haber constancia en el sistema electrónico de la presencia de un tren. En paralelo, se envió a dos operarios para que analizaran visualmente el estado del desvío. El accidente se produjo cuando estos trabajadores estaban en plena tarea y por escasos metros no se vieron afectados por el descarrilamiento.

La jueza también pedía información sobre los trabajos de mantenimiento. El ADIF explica que en realidad no existieron tales trabajos y que en ningún momento afectaron a la vía general, sino solo al desvío (vía 3). La existencia de reparaciones en la zona de la estación habría activado un protocolo diferente, pues no se pueden manipular elementos del enclavamiento en plena circulación.

En la documentación remitida, los técnicos del ADIF alegan que la maniobrade probar un desvío con un tren en marcha no solo es habitual, sino que está prevista en el Reglamento de Circulación Ferroviaria.

Por otra parte, la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) tiene previsto realizar entrevistas la semana que viene en Vigo en relación con el accidente, según han informado fuentes consultadas por Europa Press.