A las seis de la tarde de ayer quedó restablecida la circulación de la línea férrea entre Córdoba y Jaén tras el descarrilamiento de un tren en Villafranca de Córdoba, que se produjo hacia las once y veinte de la mañana al entrar en la estación de esta localidad del Alto Guadalquivir, cuando se dirigía a Córdoba. Ninguno de los 13 viajeros ni el maquinista del convoy de media distancia resultaron heridos. Fuentes de Adif señalaron a este periódico que el incidente se produjo en uno de los cambios de vías que se realizan cuando los trenes se aproximan a los andenes. En ese momento, una de las ruedas del segundo eje se salió del raíl.

A pesar del accidente, ninguno de los cinco vagones llegó a volcar, lo que evitó daños personales y materiales más graves. La baja velocidad a la que se desplazaban los vagones, debido a su acercamiento a la estación, también mitigó las consecuencias del suceso.

Los servicios de emergencias del 112 recibieron la notificación por parte de Adif a las 11.40 horas y alertaron a la Guardia Civil, la Policía Local y los Bomberos, aunque su presencia no fue necesaria. Un tren mecánico partió entonces desde Córdoba con objeto de despejar la vía y reparar al tren siniestrado.

El tren afectado pertenece a la línea de media distancia entre Jaén y Córdoba. Renfe, por su parte, puso en marcha un servicio alternativo para el transporte de los viajeros, que fueron trasladados poco después hasta la capital cordobesa.

Las labores de reparación del convoy se iniciaron hacia las 14.00 horas, concluyéndose a las 17.50 horas. Al no verse afectadas las catenarias la intervención fue rápida.

Los técnicos están evaluando cuáles fueron las causas que provocaron la salida del raíl, que pudo deberse a una diferencia de nivel de la vía principal por la que circulan los trenes con respecto a una secundaria de la propia estación de Villafranca.