Lakua admite que el tren ha pasado en tres ocasiones por Durango sin bajar las barreras

Iñaki Arriola reconoce las "incidencias", mientras los vecinos critican el retraso del soterramiento

Aitziber Atxutegi - Miércoles, 11 de Enero de 2012

Bilbao. El consejero de Vivienda, Obras Públicas y Transportes, Iñaki Arriola, admitió el lunes fallos en los sistemas de seguridad de los pasos a nivel de Durango. La muerte, ese mismo día, de una vecina del municipio en el paso a nivel de Ollerías reavivó las críticas de los vecinos, que llevan meses denunciando que las barreras no siempre se bajan al paso de los convoyes. Además, asisten indignados a los constantes retrasos que acumula el proyecto de soterramiento de una vía que parte el municipio en dos y detiene su actividad cotidiana cuatro veces a la hora, cada vez que un tren circula por ella.

Los vecinos de Durango han advertido reiteradas veces de que, en ocasiones, los trenes pasan por los seis pasos a nivel que existen en Durango sin que las barreras estén bajadas, un hecho grave que pone en peligro la seguridad tanto de los peatones como de los conductores. El arrollamiento mortal del lunes en el paso a nivel de Ollerías, aunque se produjo según señaló la empresa pública vasca de infraestructuras ferroviarias Euskal Trenbide Sarea (ETS) con las barreras bajadas y las señales acústicas en funcionamiento, no hizo sino reavivar los temores de los vecinos, hartos de que sus quejas caigan en saco roto. Un hartazgo que todavía crece más debido al retraso de cuatro años que acumulan las obras de soterramiento de la vía, que debía haber entrado en servicio a finales de 2009 y no lo hará hasta, al menos, 2013. No en vano, los vecinos consideran el soterramiento del tren la principal necesidad de la localidad, según una encuesta realizada hace algo más de un año por el Consistorio durangarra.

En una respuesta parlamentaria por escrito, Iñaki Arriola admitió el lunes tres "incidencias" en poco más de un mes en dos de los seis pasos a nivel de EuskoTren que existen en Durango. En concreto, el consejero socialista reconoce que los días 20 y 27 de septiembre fallaron las barreras del paso a nivel de Olmedal -situado en la calle Ermodo- y el 28 de octubre, en el de Landako, en la calle Ollerías, el mismo en el que el lunes falleció la mujer.

En el caso de los dos primeros fallos, Arriola explica que se debieron a un error humano por parte del operador de tráfico del puesto de mando, "al pulsar la opción de abrir el paso a nivel en lugar de la de cerrar". Y es que, según explicaron ayer fuentes del departamento, en aquel momento la subida y bajada de barreras se hacía de forma manual para reducir los tiempos de espera de peatones y conductores ante el paso de los convoys. Sin embargo, y para evitar que situaciones de este tipo se volvieran a repetir, se dio la orden para que la subida y bajada de las barreras no se realice de forma manual, sino automatizada en cuanto el sistema detecta la llegada del tren. "Se ha dado la orden de que no se vuelva a actuar sobre el mismo pulsando la orden de cerrar", recoge Arriola en su contestación.

Respecto a la incidencia registrada en octubre en el paso a nivel de Landako, el consejero lo achaca a una "avería que impide la correcta bajada de las plumas". En este caso, explica que se ha realizado una modificación "consistente en que cuando aparezca el tren las barreras bajen". También se llamará "de forma urgente" a la Brigada de Reparación Urgente de Mantenimiento o se contactará con personal de Euskal Trenbide Sareak que se encuentre cerca del paso a nivel afectado, "para levantar las barreras con el mando local de subir y permanecer allí hasta que se repare la incidencia".

En su contestación, Iñaki Arriola expone el protocolo que se sigue en EuskoTren cuando las barreras no bajan, remitiéndose al Reglamento de Circulación y Señales. "Cuando el paso a nivel está sin protección, el maquinista procederá a detenerse ante el mismo y no reanudará la marcha hasta que se encuentre protegido o, en su defecto, reanudará la marcha si nada se lo impide, haciendo uso continuado de silbato y a 10 kilómetros por hora hasta rebasar el paso a nivel", explica.

Ayuntamiento Por último, el consejero de Vivienda, Obras Públicas y Transportes admite también que no se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento de Durango para abordar esta problemática al no considerarlo "necesario" por ser un ámbito "exclusivamente competencial de este departamento". Además, afirma que no ha recibido, por parte del Consistorio, "petición alguna a este respecto", un extremo negado ayer por los responsables municipales que dicen haber solicitado el encuentro.

Haciéndose eco de las denuncias de los vecinos de la localidad, alarmados por que "los trenes pasan a menudo por los pasos a nivel sin que se bajen las barreras", el parlamentario de Aralar Dani Maeztu remitió al departamento de Iñaki Arriola una batería de preguntas el pasado 7 de diciembre: "A finales de octubre y principios de noviembre de 2011 eso ocurrió varias veces".

Estas nuevas revelaciones se unen a los constantes retrasos que el prometido soterramiento de las vías del tren, que, según los planes del anterior Gobierno vasco, debía estar finalizado en 2009, y con la llegada el nuevo Ejecutivo, no verá la luz hasta, al menos, 2013. Los recortes presupuestarios han retrasado la construcción de la nueva estación y las futuras cocheras de Lebario por lo que, pese a que las trincheras ya están construidas, los convoyes no dejarán de atravesar Durango a cielo abierto hasta el próximo año.