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26 julio 2018
LUGO CIUDAD
El Alvia a 150 por un paso sin barrera que atraviesan decenas de camiones
Mientras llega la supresión proyectada por ADIF, vecinos de Céltigos temen que pueda pasar algo
OSCAR CELA 26/07/2018 07:45 h
Tiene señales luminosas y acústicas, pero aún así asusta. Ver pasar el tren a toda pastilla y comprobar que el paso a nivel no tiene barreras, hace temblar las piernas. Eso es lo que ocurre en Lousadela, en las cercanías de Céltigos, donde la carretera que parte de Vilapedre atraviesa la vía de Monforte-Coruña. Dicen los vecinos de Lousadela, el núcleo más próximo al lugar, que ADIF lo tiene en una lista de supresión, en la que están otros 35 en el tramo hasta Ourense, pero de momento no hay trazas de que este peligroso punto desaparezca.
El martes por la tarde, en un espacio de solo un cuarto de hora atravesaron el paso cuatro camiones. Todos ellos tenían como destino o salida la factoría de Fontecelta. También atravesaron media docena de turismos particulares y algunos viandantes.
El sistema actual consiste en dos postes con señales luminosas rojas en cada una de las entradas. También hay unas aspas. A mayores, el sistema emite unos pitidos seguidos unos tres minutos antes. Aún así se echa muy en falta una barrera. Las luces rojas, si el sol da de frente, se ven con dificultad. Los sonidos pueden no ser escuchados si alguien lleva la ventanilla del coche cerrada.
«Témolles»
Pepe, un vecino de la zona que va camino de los noventa, sabe a las horas a las que pasan algunos trenes por el lugar. «Agarden que vai vir o Alvia de Madrid e xa verán...», indica. Y efectivamente, el tren pasó por el lugar a las 19,18. Lo hizo a unos 150 kilómetros por hora, que es lo que marca una señal colocada a la salida del apeadero de Pedrelo-Céltigos. Solo con el viento que origina su paso podría arrastrar a alguna persona que se acercara al paso. También circulan por el lugar a velocidades similares los trenes hotel de Madrid y Barcelona y las unidades de media distancia de Ourense y A Coruña. «Eu témolles porque pode pasar calquera cousa. Moito gastaron na estación da Pobra que non se usa, e isto mire como está», dijo una vecina.
