La Voz de Asturias

9 julio 2018

ASTURIAS

Un viaje reivindicativo en tren por el occidente asturiano

Usuarios de la línea que une Gijón y Oviedo con Ribadeo organizan un trayecto con el que denunciar las carencias del serivicio

La línea de Feve que recorre el occidente se encuentra prácticamente vacía cada día

Los usuarios de Feve en el occidente de Asturias llevan mucho tiempo reclamando mejoras en los servicios de la línea que recorre la zona. Tras varias peticiones sin respuesta por parte del servicio ferroviario han decidido salir a la calle o, más concretamente, subirse al tren. La Plataforma por la Defensa del Ferrocarril en el Occidente de Asturias y la Asociación de Usuarios de Feve-Renfe España preparan un viaje reivindicativo de ida y vuelta en tren para el próximo 5 de agosto, con salida desde Gijón y Oviedo hasta Ribadeo. Con este trayecto los usuarios afectados quieren destacar todos los defectos de los servicios de una línea que cada día pierde más usuarios.

«El servicio que se ofrece es pésimo y cada vez va a peor», asegura Daniel Cuéllar, fundador de la plataforma de afectados en Facebook. Según Cuéllar, la línea que une las principales ciudades asturianas con Ribadeo acumula una gran cantidad de deficiencias en todos los ámbitos del servicio: Estado de los trenes, trazados de vía, falta de maquinistas o suspensión de viajes sin previo aviso. «Además, solo tenemos dos servicios de ida y dos de vuelta al día, lo que nos limita mucho a la hora de coger este transporte público», explica. Incluso los apeaderos se encuentran en mal estado, lo que hace que la espera del tren durante los inviernos sea más cruda. Todas estas carencias han provocado que la línea sea cada vez menos utilizada. «La gente coge menos el tren y la empresa se justifica con eso. Como nadie coge el tren se suprime el servicio», explica Cuéllar, que asegura que el desuso del servicio se debe a sus deficiencias y no al revés. 

Los principales afectados: los más mayores. «Mis vecinas de Santa Marina, con una media de 60 y 70 años ya no se arriesgan a coger el tren hacia Luarca por miedo a quedarse sin línea», cuenta. La mayoría de los usuarios han optado por transporte privado, ya sean sus propios vehículos o ALSA, aunque el problema de estos últimos se encuentra en las paradas. «Los autobuses realizan sus paradas en los arcenes de la carretera obligando a la gente a caminar. Los apeaderos de los trenes se encuentran más cerca de la población», explica Cuéllar. Desde la plataforma exigen que la empresa garantice los servicios existentes y se realicen a tiempo las actuaciones necesarias. «Queremos apostar por un transporte público sostenible», añade.

Este viaje reivindicativo es el resultado de numerosas propuestas y peticiones ignoradas por parte de la empresa ferroviaria e, incluso, del exministro de Fomento Íñigo de la Serna. «En su momento tuvimos la oportunidad de darle la carta en mano, pero jamás obtuvimos respuesta», critica el promotor de la iniciativa. Ahora se encuentran inmersos en los preparativos de esta movilización para la cual deberán ponerse en contacto con Renfe y solicitar un mayor número de vagones para la fecha. Aunque ahora lo que reina es la incertidumbre, dado que ni siquiera saben si serán capaces de poder realizar ese viaje. «Tal vez ese día se cancele el servicio», critica Cuéllar que insiste en la crudeza de la problemática para cientos de vecinos del occidente.