La linea 5, de Humanes a Móstoles el Soto, pasando por Fuenlabrada, Móstoles o Alcorcón, da servicio a 1.500.000 habitantes, un veinte por ciento de la población madrileña. Miles de usuarios a diario que en muchas ocasiones, denuncia la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), encuentran muchos problemas para acceder a la estación y los vagones del tren.

"En el apeadero de De la Serna han puesto hace poco un montacargas, pero tienes que llegar en un momento determinado, todo depende de que la taquilla esté abierta y a tienes que llamar por teléfono para que te atiendan", explica Juan Carlos Perea. Junto a él y con Teófilo Garcia y Felipe Talavera  iniciamos ahí  la conversación.

ADIF responde que las condiciones de acceso al servicio dependen de Renfe, aunque la Red de Ferrocarriles no ha contestado a la Cadena SER. 

"En ese apeadero hicieron hace poco una rampa a las vías, al andén, pero la inclinación hace que una persona por si sola pueda usarla. Los problemas de accesibilidad. Hay un centro a escasos metros de un centro de Eduación Especial", explican vecinos de la FRAVM.

Trenes sin plataforma a los que resulta difícil subir, rampas para poder llegar a un andén pero que por su inclinación es imposible que una persona en silla de ruedas pueda subir sin ayuda, montacargas para cruzar de andén en apeaderos como el de La Serna, por la que a diario pasan miles de viajeros, con horario limitado y siempre dependiendo de si el taquillero puede ausentarse o no de su puesto para abrir la puerta... son los problemas que se encuentran los usuarios en la línea C5.