Varios colectivos vecinales, de mayores y personas con diversidad funcional piden aFomento, ADIF y a la Comunidad de Madrid que solucionen el problema de accesibilidad que tiene la línea C 5 de RENFE en Fuenlabrada y en su recorrido total, eliminando las barreras arquitectónicas existentes.

Según Teófilo García, presidente de CLAVES, entidad que engloba a asociaciones vecinales del municipio, es una reivindicación que recoge “el derecho de toda persona a usar el transporte público, sin que esté condicionado por su movilidad reducida”. Apeaderos sin ascensor, solo con montacargas que requieren de un operario para que funcionen, o la inexistencia de rampas para el acceso al andén o a los coches, son algunos de los elementos que dice García hay que cambiar. Sin ellos, “ni mayores, mujeres con carritos de bebé o personas con problemas de movilidad pueden acceder a las taquillas o los coches”.

En la reivindicación participan el colectivo CLAVES, la Casa Extremeña, el Centro de Mayores y la asociación ASPANDI y el próximo 1 de junio pedirán la palabra en el pleno municipal para pedir el apoyo de todos los partidos políticos.

Ya hace dos meses y medio pidieron a ADIF que se instalara un ascensor en el apeadero de La Serna en lugar de montacargas que tienen limitaciones de uso. La respuesta ha sido que se realizará un estudio de viabilidad.