Los Talgo de Almería siguen siendo los trenes más lentos de todo el país

Un viajero desciende del Talgo de Madrid en la Estación Intermodal de la capital almeriense. / F. GAVILÁN

La peor ratio de velocidad la adquieren en el tramo Linares-Almería, que apenas ha sufrido obras de mejora en sus más de 100 años de historia
- MIGUEL CÁRCELES | ALMERÍA
  @MiguelCarceles
El recorte del tiempo de viaje en los Talgo que unen dos veces por día Almería y Madrid implementado en el último tramo del año pasado -de entre 5 y 23 minutos, en función de la relación- no ha permitido que la de Almería deje de ser la conexión ferroviaria más lenta de cuantas enlazan la capital española con destinos de la península en trenes de larga distancia. Concretamente, y tal y como certifica un reciente informe elaborado por la revista Vía Libre -que edita la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, de la que forman parte tanto Renfe como ADIF- pese a las modificaciones horarias y la leve reducción de los tiempos de viaje, el Talgo Almería-Madrid es, a día de hoy, el más lento de la red radial de Renfe desde Madrid. Su velocidad media: 94 kilómetros por hora.

El informe de Vía Libre cuantifica, en cada ruta, el viaje más corto de todos. A Almería le superan todas las líneas de Larga Distancia con origen en Madrid -no se cuantifican las de Media Distancia ni Cercanías-. Incluso algunas que se considerarían inicialmente como de peor calidad, como es el caso de la Madrid-Águilas (Murcia), operada bajo la marca Intercity y que usa para el trayecto un tren automotor diesel similar al que viaja entre Almería y Sevilla.

Tal y como se puede observar en la tabla adjunta -con los datos ofrecidos por la revista de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles- el servicio con una mejor velocidad comercial es el Barcelona-Madrid, que alcanza los 249 kilómetros por hora. Es casi el triple de la velocidad alcanzada por el Talgo almeriense. Gracias a la veloz marcha alcanzada por los trenes AVE en ese corredor, es posible viajar entre ambas ciudades en dos horas y media pese a los más de 600 kilómetros de distancia que las separan.

Los siguientes corredores más rápidos son los de Levante (Valencia, Alicante) y los de Andalucía occidental (Málaga y Sevilla), en todos los casos con velocidades superiores a los 200 kilómetros por hora para sus servicios ferroviarios prestados bajo la marca AVE.

Incluso los servicios ferroviarios gallegos, históricamente los peores del país en cuanto a velocidad comercial, han conseguido superar a los de Almería en velocidad gracias a la prolongación de las vías de Alta Velocidad tanto en el territorio gallego (ya enlazan Vigo, Santiago, Pontevedra, Coruña y Ourense) sino también entre Madrid y Zamora. A día de hoy, sólo Lugo queda levemente descolgada con una velocidad comercial de 99 kilómetros por hora, más incluso que Almería.

La reducida velocidad comercial media en los servicios se debe principalmente al mal estado de la vía en el tramo andaluz, especialmente entre Linares y Almería. El trayecto apenas ha sido remozado en su más de un siglo de historia. Y si bien entre Alcázar de San Juan (Ciudad Real) y Madrid la velocidad de la vía puede alcanzar los 160 kilómetros por hora, de Linares y hasta Almería hay tramos con limitaciones de velocidad inferiores a los 20 kilómetros por hora.