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14 diciembre 2016

 

CATALUÑA / INFRAESTRUCTURAS

El tranvía de las Glòries divide al equipo de Colau

  • Urbanismo y Arquitectura se enfentan por el trazado del transporte en el parque que se construirá en la nueva plaza

Imágenes del túnel que cruzará la plaza y de la zona ajardinada, Canopia Urbana, con la que se urbanizará la futura plaza
Imágenes del túnel que cruzará la plaza y de la zona ajardinada, Canopia Urbana, con la que se urbanizará la futura plaza
Ayuntamiento



David J. Fernández.  Barcelona.


Puede que esta vez sea cierto y la nueva plaza de les Glòries esté cobrando forma ante la incrédula mirada de los vecinos hastiados de promesas sobre promesas. Así se desprende, al menos, de la presentación que ayer realizó el Ayuntamiento a propósito de la plaza. Pero incluso cuando todo parece encaminado, los dos principales responsables de urbanismo del Ayuntamiento no escondieron sus discrepancias a propósito, cómo no, del trazado del tranvía sobre la plaza. Otro clásico de la ciudad. El proyecto definitivo del parque, en cualquier caso, se llevará a cabo durante 2017 y las obras de urbanización empezarán en 2018. Las Glòries, a su vez, se convertirá en un importante intercambiador entre el tranvía, el metro y los autobuses. Se edificarán 1.000 viviendas, la mitad de ellas de protección oficial, y la plaza albergará varios equipamientos.

 

Aun así, la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, y el concejal de Arquitectura, Daniel Mòdol, la primera, de BComú y el segundo, del PSC, no escondieron sus diferencias en el seno del gobierno de Ada Colau. Sanz apuesta por que el tranvía rodee la plaza y Mòdol, por que la cruce. «El tranvía y los autobuses imprescindiblemente deberían cruzar la plaza, es la única forma de que a partir de las seis de la tarde en invierno el espacio tenga control social, porque si no habrá que cerrarla», señaló. Mòdol, a la sazón, fue uno de los ideólogos del proyecto ganador, Canopia Urbana, para urbanizar la plaza. Sanz, a su vez, apuntó que «por el medio de la plaza no pasará, evidentemente». Polémica servida.

 

La Modificación del Plan General Metropolitano (MPGM), que ayer presentaban los responsables municipales, tiene por objetivo actualizar los compromisos adquiridos con los vecinos hace casi una década. Así, además de oficializar la Canopia Urbana, se establece que el millar de pisos que se levantarán se ubicarán en el lado Llobregat en diversas parcelas, la mitad de los cuales serán de protección, y el mantenimiento de las 58 correspondientes a la edificación de la esquina de la Gran Via con la calle Castillejos.En relación con la regulación de los alturas máximas de las edificaciones, el plan propone homogeneizar las alturas de las edificaciones, de manera que las edificaciones que den al parque tengan un número de plantas máximo de planta baja más 10.

 

 

En lo que respecta a los equipamientos, y como novedad, se quiere conservar la antigua Fábrica de Paragüas para destinarla a un centro de formación profesional en diseño y moda. También se reservan unos terrenos para una guardería y la ampliación de la escuela de los Encants. Además, en la confluencia de Nápoles con la Gran Vía ser reservan unas parcelas para construir un CAP, una residencia de mayores y un equipamiento administrativo. El Ayuntamiento, además, prevé dejar a la vista los restos del Rec Costal que cruzan la plaza por el extremo norte.

 

Sanz subrayó que los vecinos apoyan esta modificación porque se ha llevado a cabo «en buena parte con sus exigencias y aportaciones».




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