El Govern de la Generalitat y Adif mantienen sus diferencias respecto a los nuevos horarios de tren y el tono ha subido desde que el pasado lunes el conseller de Territori i Sostenibilitat, Josep Rull, denunciara la situación. Ayer por la tarde Rull compareció de nuevo, y afirmó que la ronda de contactos que había mantenido a lo largo de esta semana no había permitido llegar a un acuerdo. De hecho, dijo que la de ayer con el operador Renfe no había ido bien, mientras que la que tuvo lugar con Adif aún «fue peor».

De momento, y si no hay cambios de última hora, a partir del día 12 de junio los trenes incorporarán los cambios, mientras la Generalitat ya ha dicho que comunicará que éstos son «una imposición» de Fomento.

Josep Rull reiteró ayer por la tarde que los nuevos horarios «son una manera de maquillar» la demora de los servicios de cercanías y los regionales. Por ello, reclamó al ministerio de Fomento un plan «urgente» que permita poner fin a las limitaciones temporales de velocidad que afectan a la red y que, según dijo, son fruto de la desinversión. «Los nuevos horarios deberían incorporar la fecha de inicio y de fin de la actuación, para que los usuarios supieran que el cambio es temporal», dijo Rull.