Los investigadores creen que el incendio declarado este miércoles en los antiguos talleres de Ferrocarrils en Torrent fue intencionado.

El fuego ha afectado a ocho unidades de metro, que han resultado prácticamente calcinadas, y a otras dos que se han visto afectadas con pequeños daños en la pintura.

Estos trenes dejaron de circular entre los años 2007 y 2008 y se barajó en su día llevarlos al desguace. La mayoría de ellos acumulaban 30 años de antigüedad, presentaban desperfectos y sobre todo grafitis. La segunda unidad que se conserva del accidente del 3 de julio de 2006 no se ha visto afectada.

El fuego está controlado y apagado. FGV interpondrá una denuncia a la espera de que la Policía inicie la investigación de los hechos.