Los trabajadores del taller ferroviario que Renfe mantiene en Venta de Baños exigieron ayer a la empresa  que justifique el ahorro que se generaría con el cierre de las instalaciones palentinas.

En la segunda reunión mantenida por los trabajadores venteños con los representantes de la compañía pública, presentaron las alegaciones al traslado que la operadora pretende aplicar a los 11 empleados que trabajan en ese taller. «Se las hemos entregado por escrito», señaló el responsable del sector ferroviario en CCOO en Palencia, David Cuenca. 

Según explicó, los trabajadores no se creen que el taller de Venta de Baños de pérdidas a la empresa y menos cuando «nos hemos enterado que parte de la producción que se va a dejar de hacer aquí (reparación de amortiguadores) se va a trasladar al taller de Monforte de Lemos y parte se va a externalizar a una empresa privada de Madrid».

Ninguno de los 11 empleados del taller de Venta de Baños será despedido, sino que todos, según los planes de la empresa, serán trasladados a las instalaciones que Renfe tiene en Valladolid. «Esto supone que van a cobrar más, por desplazamiento y porque además las primas de producción del taller de Venta de Baños son menores que las de Valladolid. Por eso queremos que nos justifiquen el ahorro que dicen se va generar con el cierre de las instalaciones». 

Por ahora, ambas partes se han dado cita para la próxima semana en una tercera reunión que, por ley, deben mantener antes de que cualquiera de las dos partes denuncie el proceso. «En ese caso, plantearemos un conflicto colectivo», explicó Cuenca.  La intención de Renfe es que los 11 trabajadores se incorporen a Valladolid antes de final del mes de febrero. Lo harían en los viejos talleres, puesto que aún no se han abierto las nuevas instalaciones vallisoletanas.