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5 octubre 2015

El robo de cable de cobre en la red ferroviaria cuesta 171.000 euros

SPC / Valladolid - lunes, 5 de octubre de 2015

Las líneas de alta velocidad han sufrido menos robos que las convencionales en el último año. Rubén Cacho (Ical)
Las líneas de alta velocidad han sufrido menos robos que las convencionales en el último año. Rubén Cacho (Ical)

 

La red ferroviaria de Castilla y León sigue siendo uno de los puntos más atractivos para los ladrones de robo de cable de cobre pese a la ampliación de las medidas de seguridad. Desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) advierten de que el problema ha aumentado en los últimos años, pasando de pequeños robos en puntos muy localizados a grupos cada vez más profesionalizados y organizados que se mueven por toda España.
En un año (de julio de 2014 al mismo mes de este año), los robos de cable de cobre han costado a Adif 171.346 euros en Castilla y León, una cantidad baja si se compara con las de otras regiones como Cataluña, donde desde 2011 han invertido más de 21 millones de euros en reponer cable en las vías.
La mayoría de sustracciones se producen en las líneas de la red convencional, que en un año sufrió el robo de 5.993 metros en quince sucesos denunciados, mientras que en la alta velocidad fueron 217 en tres, según los datos facilitados por Adif.
Las mismas fuentes destacaron que, aunque se consigue recuperar parte del cable robado, esto no disminuye la gravedad del problema porque la mayoría de este material ya no puede reutilizarse. Una de las últimas incautaciones se produjo en la provincia de León, cuando funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de Astorga detuvieron el pasado mes de julio a tres jóvenes de 17, 18 y 19 años de edad y vecinos de esta localidad como presuntos autores del robo con fuerza de varios rollos de cobre en un inmueble de Adif de la estación de tren.
Desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, la empresa perteneciente al Ministerio de Fomento que se encarga del mantenimiento de la infraestructura, recordaron que estas sustracciones repercuten también en el servicio a los ciudadanos, «generando retrasos y problemas en el transporte ferroviario, así como degradación de las infraestructuras».
«No se trata de un problema menor, sino que va creciendo. Hemos pasado de pequeños robos en puntos muy localizados a grupos cada vez más profesionales y organizados que se mueven por toda la geografía nacional», señalaron las mismas fuentes, que advirtieron de que estos robos se han convertido en un buen negocio para el crimen organizado, ya que España se ha convertido en exportador de este mineral.
Esta situación, además, provoca perjuicios para la explotación de la red, ya que se deben destinar recursos materiales y humanos para la reposición de las instalaciones y el restablecimiento del tráfico en las condiciones habituales, para los viajeros, por los retrasos que sufren, y a la propia imagen del sistema ferroviario.
Al igual que otras compañías, Adif es víctima de estos hechos delictivos y en el marco de las iniciativas emprendidas en los últimos años para garantizar la absoluta seguridad de la infraestructura y la explotación ferroviaria, se ha reforzado la presencia y vigilancia de patrullas propias.

colaboración. Además de estas medidas, también se ha incrementado la colaboración con los cuerpos de seguridad, especialmente en aquellos puntos de las líneas ferroviarias en los que se ha detectado una mayor concentración de robos. Y se han adoptado otras como dotar a las instalaciones ferroviarias susceptibles de ser sustraídas de dispositivos de control que permiten alertar de un corte de cable, agilizando así la capacidad de respuesta para la reposición del tráfico en las condiciones habituales en el menor tiempo de plazo posible. «Se debe tener en cuenta, además, que se trata de un problema de seguridad ciudadana y por este motivo todo robo o intento se denuncia ante las autoridades policiales competentes», concluyeron las mismas fuentes.
El trabajo de las fuerzas de seguridad ha permitido desmantelar en los últimos meses algunas bandas organizadas en todo el país. Uno de los grupos desarticulado recientemente había actuado en instalaciones de las provincias de Zamora y Valladolid. La operación contra esta banda especializada en el robo de cable de cobre de las líneas de AVE concluyó con la detención de 14 hombres, diez de nacionalidad rumana y cuatro dominicanos, y el esclarecimiento de al menos catorce delitos en España.

La mayoría de las sustracciones se producen en las líneas convencionales de Castilla y León, con casi 6.000 metros robados desde julio de 2014 al mismo mes de este año
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