Una víctima de Angrois dice sentirse «olvidada» por Renfe

Denuncia las trabas que ponen para que le reembolsen el billete de un viaje para ver a su cirujano

FERNANDO MOLEZÚNA Coruña / L a Voz, 06 de junio de 2015. Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya casi dos años que el tren con destino Ferrol descarrilaba en la curva de Angrois, pero las secuelas de aquel accidente perduran en las víctimas como si el tiempo no hubiese avanzado. Así lo confirmó en Radio Voz Margot Viguera, que todavía tiene pendientes intervenciones quirúrgicas derivadas de aquel siniestro. «Me rompí cosas que ni siquiera sabía que existían. Frente, nariz, mandíbula, esternón, costillas, vértebras, el omóplato, el sacro, las dos piernas... Están siendo unos años difíciles», confirma esta víctima del accidente que a su dolor físico y psíquico añade ahora una dosis de indignación ante lo que denomina «el desprecio de Renfe hacia las víctimas».

Hace aproximadamente un mes se atrevió a coger de nuevo un tren. La misma ruta en la que tuvo el accidente: «Vivo en Madrid, pero estuve mucho tiempo hospitalizada en A Coruña y buena parte de los médicos que me han operado están ahí. Así que fui a visitar al cirujano plástico para una próxima intervención, la cuarta que me hacen en la cara», cuenta Margot Viguera. Tras un viaje que define como «una pesadilla a la que quería enfrentarme como parte de mi terapia psicológica pero que fue un choque demasiado fuerte», comenzó un peregrinar de papeles y correos electrónicos que, hasta la fecha no ha encontrado solución.

Sin respuesta

«Llamé por teléfono a Renfe y me dijeron que las víctimas del accidente teníamos derecho al reembolso del valor del billete de tren si el viaje estaba relacionado con cuestiones médicas derivadas del accidente», relata. En esa conversación telefónica le requirieron que escanease el billete y, acompañado de un justificante del médico, lo remitiese a una dirección de correo electrónico. Así lo hizo, pero no obtuvo respuesta: «Esperé tres semanas y volví a mandar el correo, pero nada. Así que llamé por teléfono y me dijeron que estaban en ello, pero que no podían decirme más, que lo habían pasado a otro departamento y que no podían ponerme con ningún responsable», cuenta la afectada.

Al día siguiente de que tuviese lugar esta conversación, según cuenta Margot, recibió otro correo electrónico en el que se le requería que enviase los originales del billete y el certificado médico a una dirección en Madrid. «Les contesté poniéndoles verdes y se limitaron a mandarme el mismo correo otra vez. Parece que ni leen mis mails», lamenta la víctima, que asegura que continúa a la espera de alguna aclaración por parte de Renfe.

Desde la compañía aseguran que están estudiando el caso. Mientras, Margot insiste en que no se trata de recuperar los 222 euros del viaje: «Eso es lo de menos. Lo que me indigna es el detalle, la falta de atención, la sensación de que se han olvidado de nosotros. Y si estoy así es por su negligencia. Solo pido que me faciliten las cosas o, al menos, que no me pongan cada vez más trabas, porque esta semana he recibido otro correo en el que me piden un justificante bancario de mi número de cuenta», denuncia la afectada.