leire pérez | etxebarri

A una vecina de Basauri le va a salir caro el reprocharle a un agente de seguridad del Metro Bilbao el haberse quedado «tirada» en la estación de Etxebarri «a las 23.10 horas» del pasado 23 de abril, minutos después de que circulase el último tren con destino Ariz. La joven, que trabaja en Getxo, suele viajar en el penúltimo metro, el de las 22.20 horas, para regresar a su casa, pero ese día salió tarde de su puesto y se vio obligada a subirse en el que circulaba 20 minutos después, sin tiempo para conectar con la última estación de la Línea 2, la de Basauri, puesto que las frecuencias a esta parada son mayores que en el resto del recorrido y no alcanza el último convoy del día.

A tenor de lo ocurrido, la chica se dirigió al vigilante de seguridad. «Me quedé allí tirada, habiendo contratado un servicio que no me estaban prestando y le dije que no me parecía normal que me quedase allí. El empleado estaba muy nervioso y cuando salí a chequear el bono una trabajadora me pidió que le mostrase mi carné de identidad», asegura la joven usuaria que prefiere guardar el anonimato.

Un mes después le ha llegado una carta a su domicilio en la que el Departamento de Transportes de Gobierno vasco le informa de una sanción de 150,25 euros por «haberse negado a abandonar el tren habiendo finalizado el servicio» y le brinda la posibilidad de presentar alegaciones. Ella lo niega rotundamente. «Es falso. No me negué a irme, sólo me queje de lo que me sucedía. Allí no tuvo que ir nadie a echarme. No vino la Policía, me fui por mi propio pie -sostiene-. No entiendo que me pongan una multa administrativa».

Interrumpir el servicio

Portavoces de Metro Bilbao, sin embargo, argumentan que la sanción está enmarcada en el reglamento de la sociedad y en la Ley estatal del Sector Ferroviario, porque «no se puede interrumpir una llegada y una salida». Afirman que la joven «se negó a salir de la unidad y, posteriormente, de la estación, retrasando el cierre de las puertas y las labores de mantenimiento de los convoyes».

«La línea no es nueva, lleva años funcionando así y los pasajeros deben saber que se acaba ahí. Una vez que inauguremos Kabiezes el último tren llegará a Basauri, pero a día de hoy todavía no se puede», expusieron. Desde la empresa pública dependiente del Consorcio de Transportes también alegaron que «los horarios y recorridos son públicos, están en la página web y cualquiera los puede consultar».