Ni un simple telegrama oficial de condolencia, ni la presencia de un solo representante de la compañía ferroviaria en el tanatorio o en el funeral. Los padres de Bibiana Presa -la joven de 27 años que falleció el pasado viernes 7 de diciembre tras ser arrollada por un tren en el apeadero de Noreña- lamentaron ayer «la falta de sensibilidad» de los responsables de la empresa Feve, frente a las muestras de solidaridad generalizada que recibieron desde todos los puntos de la comarca.

Según explicaron a EL COMERCIO Benido Presa y Berta González, no fue hasta el pasado martes cuando acudió a darles el pésame a su domicilio de El Berrón el gerente de Viajeros de Feve, José Luis Coutado. Pero piensan que esa condolencia de última hora pudo estar motivada por el hecho de que un miembro de la familia expresó su malestar a un representante sindical de Feve, que a su vez transmitió esa indignación a la empresa.

La joven fue atropellada a las 19.06 horas de la tarde del viernes. Acababa de apearse de un tren procedente de Gijón y había quedado con unas amigas en Noreña para ir al cine. Cuando atravesaba las vías para salir de la estación, fue arrollada por un convoy de pasajeros que circulaba sentido Gijón. No se conoce con certeza las circunstancias del atropello y hasta el momento son todo especulaciones. Se verificó que la joven llevaba unas bolsas en la mano y se comenta que hubo otros tres pasajeros que lograron esquivar el convoy. La familia se instaló después en el tanatorio de Pola de Siero y el funeral se celebró el pasado domingo en la iglesia de La Carrera.

Los padres no tienen la más mínima queja de la actuación de los miembros del 112 Asturias, de la Guardia Civil, de la Policía Local de Noreña y de los servicios sanitarios, que no pudieron hacer nada por salvarle la vida. Ahora están a la espera de las conclusiones de los informes y los hechos están siendo instruidos por un Juzgado de Oviedo.

La familia va estudiar la posibilidad de exigir responsabilidades a la compañía por el accidente. «A la mi fía ya la perdí, pero lo principal es que se solucione y no vuelva a pasar más», comentaba la madre, Berta González. Y es que el apeadero de Noreña no reúne las mínimas condiciones de seguridad y los usuarios se ven obligados a atravesar a diario las vías desde el andén exterior. También les llama la atención que pueda estar circulando un convoy en sentido contrario en el mismo instante en que los pasajeros se apean de otro tren, aunque suele ser una práctica habitual.

La situación de tener que atravesar las vías se produce también en otras estaciones y apeaderos del concejo de Siero, como Pola de Siero, El Berrón y Carbayín. Un tío de la víctima es el concejal socialista del Ayuntamiento de Siero, Vicente Presa, quien anunció que va a comentar con su partido la posibilidad de presentar algún escrito para mejorar la seguridad. En el Ayuntamiento de Noreña han remitido ya un escrito similar al presidente de Feve, a la directora de de la División de Infraestructuras de la empresa, al delegado del Gobierno en Asturias y a la ministra de Fomento.