eldiariovasco.com

11 julio 2016

El proyecto, con tres estaciones, llevará el suburbano a pie de playa

  • Ayuntamiento y Gobierno Vasco realizarán reuniones con vecinos y comerciantes para explicar el proyecto y las afecciones durante los trabajos

     

    JM.V. |  SAN SEBASTIÁN.

    La obra de la pasante soterrada por el centro de San Sebastián llevará el metro a pie de playa. En concreto, se trata de un trazado de 4,2 kilómetros dividido en dos tramos: Lugaritz-La Concha y Miraconcha-Morlans. El primero, de unos 2.200 metros de longitud, parte a cien metros de la actual estación de Lugaritz, desde donde desciende hacia el Antiguo para discurrir próximo al ensanche residencial de Benta Berri, donde se construirá la primera estación, y llegar cerca del Palacio de Miramar.

    El segundo tramo, de unos 2.000 metros de longitud, parte del Palacio de Miramar y discurre casi en paralelo a la línea de costa hasta alcanzar el centro de la ciudad, donde se ubicará la segunda estación proyectada -Centro-La Concha-, a pie de playa. Dispondrá de tres accesos.

    El trazado continúa en dirección sur para, una vez sobrepasada la terminal actual, alcanzar la nueva estación de Easo, que será soterrada y pasante, en lugar de la configuración actual, como fondo de saco donde entran y salen los trenes.

     
     

    Cuatro años de obras

    Si se cumple el calendario previsto, las obras de la nueva pasante del metro por el centro de Donostia comenzarán en otoño y durarán cuatro años. Los trabajos comenzarán en tres lugares distintos: en una ladera de la calle Zarautz, a la altura de la plaza Eugenio Imaz; en un solar en el paseo Pío Baroja, junto al polideportivo, y en la ladera existente entre la calle Autonomía y la rotonda de Morlans. En estas zonas, elegidas con el criterio de que los trabajos no molesten a los vecinos y sean lo menos visibles posible, se abrirán los cañones de ataque desde donde los túneles irán avanzando hasta encontrarse. Para excavar el terreno se utilizarán rozadoras en vez de tuneladoras para reducir las vibraciones.

    Tanto el Gobierno Vasco como el Ayuntamiento de San Sebastián realizarán reuniones con vecinos y comerciantes de las zonas afectadas -se prevé que se levante un tramo de la calle San Martín- para minimizar el impacto de las obras en negocios y día a día de los ciudadanos.

    «Queremos hacer un esfuerzo importante para explicar el proyecto y las afecciones a los vecinos, sobre todo para quitar miedos. Es lógico que haya preocupación y, a través de la información, queremos atenuar esos miedos que pueda haber», aseguran fuentes del Ayuntamiento de San Sebastián.

    A pesar del respaldo institucional que concita el proyecto -la semana que viene se visualizará en un acto que tendrá lugar en la Cámara de Comercio de Gipuzkoa-, también hay detractores. La asamblea de vecinos y asociaciones Satorralaia se ha manifestado en repetidas ocasiones para solicitar «la paralización del proyecto de pasante del Metro».

Pin It