BURGOS
Las obras del AVE a Burgos están paradas. No hay más que ver las fotografías que ilustran esta información. Pero oficialmente esa paralización no se reconoce. A lo sumo se admite que se trabaja para «desbloquear esa situación», que no es otra que el pulso que las empresas adjudicatarias de las obras de la Alta Velocidad mantienen con el Ministerio de Fomento. En Burgos y en otros puntos del país. 

Adif guarda silencio y los contratistas callan ante los medios de comunicación, pero los hechos hablan por sí mismos: quedan siete meses para poder cumplir -después de varios retrasos- la promesa de la ministra de Fomento de que el AVE a Burgos llegará este año. Y a fecha de hoy, a partir de Celada del Camino ni hay vía ni hay catenaria. Los trabajadores han vuelto a sus casas y la maquinaria de alquiler se ha devuelto. 

Pulso nacional
La polémica generada en las obras de las líneas de alta velocidad por la amenaza de las grandes constructoras de paralizar las obras si no se aprueban los modificados y las presiones de éstas para dirimir quién debe asumir los sobrecostes de estas modificaciones sobre los proyectos ya aprobados y licitados ha salpicado al tramo que resta por conectar el AVE en Burgos. 

Una situación que ha ralentizado los trabajos de la empresa adjudicataria, una UTE formada por Altec Infraestructuras y Torrescámara. Este periódico intentó contactar con la empresa y establecer si esta polémica había salpicado a la obra del tramo entre Estépar y Burgos y si el problema venía sobrevenido por estar pendiente de aprobación el modificado o por quién debería asumir el sobrecoste derivado, pero declinó hacer declaraciones. «No tenemos nada que decir, no vamos a hablar con los medios», fue la respuesta que se obtuvo. 

Por su parte desde Fomento, el diputado del PP por Burgos, Jaime Mateu, no confirmó que la obra estuviera paralizada, pero sí que «se está trabajando intensamente para desbloquear la situación». Recordó que el problema, en el caso de Burgos, llegaba por «certificaciones y las empresas juegan su papel y la función de Adif es defender su estatus». 

Mateu reiteró que desde Adif, organismo que tampoco atiende a los requerimientos de información, «se está trabajando y con todos los escenarios abiertos», aunque insistió en que «dinero hay», dado que en el presupuesto aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy antes de la celebración de las elecciones de diciembre, se incluyó una partida de 90 millones de euros para el AVE, para continuar hacia Vitoria y en el que se incluye el presupuesto del tramo entre Estépar y Burgos. 

«Es una cuestión de carácter técnico que ha sobrevenido y se está trabajando en solventar esta situación», insistió el diputado popular quien asegura que se reúnen «casi todas las semanas». 

Reanudar las obras 
El modificado que afecta al proyecto del tramo de Estépar y su conexión con Burgos está aún pendiente de aprobación. En su momento se presentó con todas las justificaciones oportunas para que la Administración pudiera aprobarlo porque de otro modo no hubiera podido admitirse. Ahora es Adif quien «está trabajando con estas subcontratas para, con modificado o sin modificado, pueda reconducirse la situación por indicación expresa de la ministra» y «reanudar las obras cuanto antes».

La ventaja, a juicio del diputado popular por Burgos, es que al haber un presupuesto aprobado, la ejecución del AVE a Burgos continuará adelante. «Si no se hubiera tenido esa previsión, ahora no habría negociaciones para reanudarlas». Afirmó, rotundo, que «el AVE hasta Burgos está garantizado».

Considera que con independencia del futuro Gobierno que salga de las urnas en las elecciones de junio, «imperará la sensatez» y el AVE llegará a Burgos. Si bien matiza que hay otras fuerzas políticas que se plantean las grandes infraestructuras que están en marcha en el país y que en el caso de las vías de alta velocidad se verían afectadas por un planteamiento económico al pretender, en un principio, abaratar las obras y establecer velocidades medias con trenes Alvia. Jaime Mateu incide que el Partido Popular mantendrá «la filosofía de mantener estas infraestructuras que vertebra territorios».

El nivel de ejecución de la plataforma de la línea de Alta Velocidad está al 95% según avanzó a este periódico a mediados de abril el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), pero el tramo desde Estépar que conectaría con Burgos aún falta ejecutar trabajos complementarios y está pendiente de aprobarse el modificado «con todas las garantías técnicas y jurídicas», según manifestó la ministra de Fomento, AnaPastor el 12 de abril en una visita a Valladolid. 

Esto supone un nuevo retraso para que la alta velocidad ferroviaria llegue a Burgos, aunque desde Fomento se insiste en que no peligra su ejecución porque hay partida destinada a ello en los presupuestos de 2016 y «la ministra está muy encima de ello y tiene un interés personalísimo» en que se ejecuten, concluyó Mateu.