La integración de Feve no acabará en junio por el mal tiempo y los problemas técnicos

La compañía no fija un nuevo plazo para la conclusión del proyecto e inicia la pavimentación de la futura plataforma en el extremo próximo a la Asunción

A. Martínez / León
El plan de integración de la línea de Feve en el tejido urbano de la ciudad de León sigue dando pasos para suturar la brecha que ha partido en dos la zona norte de la ciudad durante 90 años.
Una vez culminados los trabajos en la zona próxima del puente de los Maristas (construcción de un nuevo viaducto con vano más ancho para permitir el paso de los trenes-tranvía y de la senda peatonal, enlace de Álvaro López Núñez con Ramón y Cajal y un muro para cerrar el colegio), los trabajos se centran ahora en el inicio de la urbanización de lo que será la nueva plataforma de ancho métrico.
Tras aplicar las diferentes capas de relleno para elevar la cota de la vía y ponerla al nivel de las calles adyacentes, los operarios han comenzado ya a esparcir un primer manto de hormigón como base de la superestructura del nuevo tendido ferroviario. Esta fase ha comenzado en los últimos días y lo ha hecho por el extremo norte del proyecto, es decir, por la zona más próxima al apeadero del barrio de la Asunción, que es el punto donde ahora finaliza el recorrido de los trenes de Feve.
Sin embargo, esta fase se ha detenido debido a las recientes lluvias. Es necesario drenar el terreno antes de seguir adelante con la operación. Las inclemencias meteorológicas han afectado al proyecto de integración en varias de sus fases y eso ha condicionado el desarrollo de los trabajos.
Fuentes de Adif han confirmado a este periódico que el plazo de finalización, previsto inicialmente para junio, no podrá cumplirse debido a que el mal tiempo y cuestiones derivadas de la “complejidad” de una infraestructura de estas características en una zona urbana condiciona notablemente el avance de la obra. Las mismas razones utiliza Adif para no fijar un nuevo plazo para que los nuevos trenes-tranvía de Feve vuelvan a entrar hasta la estación central de la avenida Padre Isla.

Respecto a los problemas técnicos que han surgido en el desarrollo de la integración ha aportado más detalles la concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de León, Belén Martín-Granizo. Los trabajos para compactar las diferentes capas de relleno y elevar así la altura de la vía se han ralentizado a raíz de las vibraciones que sufrían los edificios colindantes a la zona de la traza ferroviaria.
La edil detalla además que en la zona más próxima a los Maristas, aún es necesario ganar 50 centímetros de altura mediante nuevas capas de material. Mientras, en el extremo opuesto, sobre el hormigón aplicado estos días se colocarían ya los adoquines que configurarán la nueva superficie para los trenes de Feve.
Aunque el núcleo del proyecto sigue adelante (plataforma para los nuevos trenes-tranvía entre la estación de Padre Isla y el apeadero de la Asunción), es preciso recordar que la integración de Feve experimentó un vuelco con la llegada de los nuevos responsables de la compañía estatal. La inversión se ha reducido un 30% sobre la prevista inicialmente. Concretamente, la cifra pasó de 71 millones de euros a sólo 45. La rebaja se basa en el aplazamiento del ramal que se había previsto hasta el hospital desde la calle Peligros, cuya ejecución está supeditada a un estudio de viabilidad que se tenía que haber dado a conocer ya el pasado mes de noviembre y del que nada se sabe aún. El ajuste deriva además en que León no recibirá los cuatro tranvías que había encargado la compañía para cubrir este trayecto y en que tampoco se electrificará la plataforma.
Cuando esté lista la nueva plataforma de Feve, los leoneses podrán pasear por una senda paralela a la vía desde el puente de los Maristas hasta el parque se San Mamés, donde la vía alcanzará el nivel de las calles adyacentes. Desde este punto, el paso de los vehículos de un lado a otro de la vía estará permitido en la calle Guillermo Doncel (su prolongación va a partir en dos el citado parque de San Mamés), en la plaza de Juan de Austria y en la calle Peligros. Se mantendrá además el paso elevado de la ronda interior. El proyecto prevé además otros seis pasos únicamente para peatones.