elcorreo.com

22 enero 2013

Miranda

El Museo del Ferrocarril supera las diferencias y recibe un nuevo impulso

Aparcados «algunos malentendidos» se retoman las reuniones entre el Ayuntamiento y el responsable del III Generaciones

22.02.13 - 00:59 -
MARÍA ÁNGELES CRESPO | MIRANDA DE EBRO.

 

No es que la propuesta para la puesta en marcha del Museo del Ferrocarril tenga tanto años como la propia presencia del tren en la ciudad, pero lo cierto es que es uno de esos temas de lo que se lleva hablando desde hace tiempo y en los últimos meses parecía estar paralizado; ahora vuelve a cobrar actualidad.
Con la celebración del 150 aniversario de la llegada del ferrocarril a Miranda se pensó en la posibilidad de impulsar el proyecto pero «algunos malentendidos», acabaron provocando el efecto contrario, comenta Julio García, responsable del Museo III Generaciones y promotor de la iniciativa que en mayo de 2011 se concretó con la firma del convenio para su puesta en marcha en las dependencias del Centro Cívico Raimundo Porres.
A instancias del propio Ayuntamiento, «me llamó el alcalde», se celebró una primera reunión para «limar todas las asperezas»; algo que se ha conseguido y propició un nuevo encuentro en el que Julio García, tras valorarlo con quienes forman parte del III Generaciones, «mi mujer y mi hijo Rodrigo», presentó su propuesta para dinamizar la creación del museo. Lo primero que hay que hacer es inventariar y valorar todo el material y «eso creemos que podemos hacerlo mejor nosotros que alguien de la UBU. No pongo en duda sus conocimientos pero en una cuestión como el ferrocarril y, es más, en objetos tan específicos a lo mejor necesitaban estar tutelados por nosotros y, para eso, no vemos necesario el convenio».
Apunta García, además, que el inventario se haría a medida que las piezas fueran llegando al museo. Así, considera que «ganaríamos tiempo» porque no habría que esperar a tenerlo completo para poder abrirlo al público. En su propuesta presentada al alcalde, «él y nosotros seremos los únicos interlocutores», pone Julio García el acento en la necesidad de establecer lo que podría denominarse «un contrato sobre cómo vamos a llevar los fondos al Centro Cívico, por cuánto tiempo, quién va a mostrarlo a los visitantes; cosas así. Y deberíamos tener el documento antes de que echara a andar».
El cuándo es lo que todavía no está establecido porque ahora están esperando la respuesta del Ayuntamiento. «No quiero hablar de plazos, pero lo que ahora parece es que ya estamos otra vez en buena sintonía y parece que las cosas van por buen camino».
 
Algo vivo
García está empeñado en que el museo sea una realidad, «sería beneficioso para la ciudad», y le gustaría poder también llegar a algún acuerdo para que se hicieran «visitas guiadas, que fueran los niños de los colegios», para que Miranda siguiera manteniendo su esencia ferroviaria. Además, de este modo, sería «un museo vivo, no sólo un lugar en el que hay almacenado material; debe ser un espacio para conocer el pasado y ver lo que puede deparar el futuro». Tiene ya pensado incluso cómo serán los espacios y cómo se distribuirán las temáticas. En su mente está hasta «recrear un aula de lo que fue la escuela de aprendices»
En relación con el escenario le parece como ya se argumentó desde el principio, «muy adecuado», aunque también plantea que en los alrededores pueda haber elementos alusivos. Algo que se ha complicado «es traer el electrotrén que estaba en Noain, ahora Renfe se lo ha levado a La Sagra, en Toledo, y pensar en que pueda estar aquí es algo que ahora es más difícil»; es lo único que ahora lamenta.

 

Pin It