CAF cumple hoy cien años

Mil. Cientos de operarios junto al vagón número 1.000 salido de la entonces Fábrica de Vagones de Beasain, era 1907. / P.W.

Afectada en estos 100 años por los vaivenes económicos y políticos de cada época, el esfuerzo de todo su personal ha llevado a que resurja con fuerza renovada
En una centuria la 'fábrica grande' ha sabido crear un sentimiento de pertenencia a la misma
- JUANTXO UNANUA
- BEASAIN
Hunde sus raíces ya centenarias en la desaparecida Ferrería de Igartza. El declive de este sistema industrial llevó a dos emprendedores beasaindarras a crear la 'Fábrica de Hierros San Martín-Goitia y Compañía', que con el paso del tiempo pasaría a denominarse 'Sociedad Española de Construcciones Metálicas' y en coincidencia con el estreno del siglo XX pasaría a ser la Fábrica de Vagones de Beasain. Fueron las firmas predecesoras de una importante empresa, la más importante de Beasain y del Goierri, se trata de CAF, que hoy cumple 100 años como tal firma.
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100 años de CAF. El viernes 24 de marzo Juan José Olaizola, director del Museo de Ferrocarril de Azpeitia, ofrecerá en la sala capitular de la casa consistorial del Ayuntamiento de Beasain una conferenca en torno al tema '100 años de CAF'.

Exposición 'CAF, un siglo al servicio del ferrocarril'. Será una muestra itinerante que el día 24 estará presente en el salón de plenos del ayuntamiento. Del 25 de marzo al 2 de abril estará en la sala del Usurbe antzokia. Del 3 al 7 de abril se expondrá en Lakazo. Del 24 de abril al 5 de mayo, en Ordizia. En el Museo del Ferrocarril de Azpeitia estará del 14 de mayo al 30 de junio.

Conferencia de Andrés Arizkorreta. El 31 de marzo en el Palacio de Igartza a las 19.00 horas, el presidente ejecutivo de CAF hablará de 'CAF y el futuro'. Además, este día la muestra 'CAF, un siglo al servicio del ferrocarril' se reubicará en el Palacio de Igartza.

CAF es la 'fábrica grande', 'gure fabrika haundia', apelativos hoy ya casi en desuso pero con los que durante décadas se ha conocido a la gran empresa goierritarra. Logró que en el transcurso de los años, entre los beasaindarras, los 'vagoneros' y goierritarras surgiera una química especial, un sentido de pertenencia que en buena parte, cien años más tarde, en estos años de la globalización, parece diluirse.
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Cabe recordar que durante décadas para muchos habitantes de la villa y de la comarca, de diferentes generaciones, su día a día en buena parte se regía por el sonoro cuerno de la empresa vagonera... ¿Quién no ha estado ligado de alguna u otra forma a la empresa CAF, directamente o a través del aitona, del aita o de otros parientes cercanos por ser productores en esta ya centenaria empresa?

Este artículo no pretende ser un tratado de historia de la compañía, que cuenta con varios tomos en los que se detalla toda la trayectoria. Esa página pretende únicamente resaltar las fechas más importantes en el devenir de los 100 años de CAF como tal.

Surge en un contexto difícil

Así, fue un 4 de marzo de 1917 cuando se crea la nueva empresa en medio de un contexto bélico, el mundo por aquel entonces está inmerso de lleno en la I Guerra Mundial. En esta mencionada fecha arranca con nuevo nombre, que con el paso de los años y de las décadas se convertiría en referente europeo y mundial en la construcción y suministro de material móvil ferroviario.

El apurado trance por el que atravesaba la 'Sociedad Española de Construcciones Metálicas-Fábrica de Vagones de Beasain', que corría el peligro de que sus instalaciones fueran incautadas por el gobierno francés, lleva a sus mismos administradores a crear la 'Compañía y Auxiliar de Ferrocarriles' -CAF-. Su Consejo de Administración fue presidido por Luis Urquijo y Ussía, a la sazón marqués de Urquijo (propietario del Banco Urquijo). La nueva compañía creada iba centrada a la explotación de la Fábrica de Vagones en régimen de arriendo. La entrada del mencionado banco resultó ser un alivio ya que esta entidad bancaria consiguió que las multas fueran condonadas y además se obtuvo el respaldo de la banca francesa.

Aquel 4 de marzo de hace una centuria CAF quedó registrada, por un periodo de 20 años prorrogables. Declaraba tener por objeto «la construcción, compra, venta y alquiler de vagones y de cuantos elementos materiales pueden servir para el transporte y para la explotación de caminos de hierro y tranvías, así como para cualesquiera otras manufacturas relacionadas con ella», según se señala en el libro de Elena Legorburu 'La fábrica grande. Historia de Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles'.

Todo parecía indicar que en el transcurso de los años un prometedor futuro se iba abriendo a los ojos de los administradores de la fábrica. Así en 1925 el Consejo de Administración decide comprar la fábrica de Beasain.

Militarizada en 1936

Los vaivenes de la vida política y económica en la década de los 30 y 40 del pasado siglo dejarían sentada huella en el devenir de la empresa; huelgas, despidos, reducción de plantilla, la contienda del 36 y la militarización de la empresa que pasaría a fabricar material militar... Concluida la Guerra Civil, la creación de Renfe revívía esperanzas por la puesta en marcha de un nuevo parque de material ferroviario...

En 1940 arrienda unos talleres en Irun orientados íntegramente a la reparación. En 1941 actuaría de igual manera en Madrid y en esa línea expansiva en 1947 adquiría participaciones de la Sociedad Material Móvil y Construcciones de Zaragoza.

La producción de CAF entre 1939 y 1950 anotaba 6.042 vagones, 85 coches construidos y 16.000 unidades más restauradas.

Transformación y ampliación

Pero CAF logró sobreponerse a los imponderables y en 1956 aborda una total y profunda renovación de sus instalaciones. Surgen los Talleres Nuevos en Senpere (en el solar que ocupó el mítico campo de fútbol y aledaños), nueve grandes naves para albergar los Talleres Mecánicos y de Montaje. En 30 años CAF incrementó su superficie en 112.000 m2. Desde las últimas décadas del pasado siglo y en lo que va del presente vive una constante renovación y puesta al día de sus naves y talleres. Readecúa y adapta a las distintas necesidades de la empresa veteranos edificios que forman parte de las firmas predecesoras de CAF. No se puede pasar por alto que en 1971 pasa a denominarse 'Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles' fusionándose y absorbiendo la factoría de Zaragoza.

Internalización

Parte de la década de los años ochenta del pasado siglo se convierten en años de incertidumbre hasta que una nueva dirección pilotada por el beasaindarra José María Baztarrica toma el puente de mando de la nave reconduciendo su rumbo, con balances anuales positivos, internacionalizando la misma, diversificando mercado para eludir todo lo relacionado con la palabra crísis, etcétera. Llegaría con él la estabilización del accionariado, seduciendo a las cajas vascas para formar parte del mismo e implicando a la parte social, en definitiva, remando todos en el mismo sentido, dirección y trabajadores, llega ese despegue.

En 1991 José María Baztarrica pasa a ostentar la presidencia ejecutiva de CAF, hasta el 29 de diciembre de 2015 en que renunciaba voluntariamente a la misma, quedando como presidente honorario y pasando el testigo al hasta entonces consejero delegado, Andrés Arizkorreta.

Aquel 4 de marzo de 1917, los empleados de CAF llegaban a 1.650. Cien años más tarde, en pleno 2017, bajo el paraguas de la marca corporativa CAF, en su matriz de Beasain, resto de factorías y filiales, supera ampliamente las 7.000 personas en su plantilla.