elpais.com

6 febrero 2018

Temporal de nieve

La red viaria de Madrid supera la primera gran nevada en nueve años

Las carreteras registraron retenciones y algunos incidentes por la mañana pero se recuperó la normalidad a lo largo de la tarde

 
El aeropuerto de Barajas, como algunas carreteras de la región, sufrió los efectos de la nevada. ATLAS

La jornada de este lunes empezó con malos augurios. El tráfico se colapsó a primera hora en el norte de la capital, fundamentalmente por el cierre del túnel de plaza de Castilla. Sobre las diez empezó a nevar con fuerza y las primeras señales de gravedad llegaban desde la M-40: atascos y algunos coches cruzados. Poco después, Barajas cerraba dos de sus cuatro pistas. Sobre las dos, la Comunidad declaraba el nivel de prealerta, el Ayuntamiento elevaba la gravedad de su plan de inclemencias y Fomento pedía usar el transporte público. El tráfico comenzó así a mejorar y las retenciones fueron las habituales de un día laborable.

 

Los problemas que la nieve ocasionó en Madrid quedaron lejos de los registrados hace nueve años, cuando el aeropuerto de Barajas permaneció cerrado durante más de cuatro horas y los accesos a la capital se convirtieron en una trampa para cientos de miles de vehículos. La Aemet, recuerda en su blog el meteorólogo José Antonio Maldonado, no estuvo acertada. Alertó de nevadas en Madrid de entre tres y cuatro centímetros, correspondientes a nivel amarillo, aunque finalmente las cantidades acumuladas fueron de nivel naranja, "de siete centímetros en Barajas y de cinco en el interior de la ciudad". Esta vez, la activación de protocolos en distintos niveles de la administración hizo más llevadero el temporal. 

Pistas cerradas en Barajas. El aeropuerto sufrió importantes retrasos, pero no dejó de operar durante los momentos de mayores precipitaciones. A mediodía, eso sí, cerró dos de sus pistas para realizar labores de limpieza y volvió a abrirlas cuatro horas después. Según el balance final de AENA, se cancelaron 70 vuelos (33 llegadas y 37 salidas) y seis fueron desviados a otros aeropuertos: cuatro a Valencia y dos a Barcelona. Sobre los 1.075 programados para el día de, la nieve afectó a un 7%.

Carreteras en alerta. La inusual situación climatológica registrada en toda la región (el aviso naranja por nevadas estaba vigente hasta la pasada medianoche) provocó la activación de protocolos de emergencias a distintos niveles. La Delegación de Gobierno puso en marcha por primera vez este año el nivel de preemergencia por nieve en la red de carreteras del Estado que pasan por la región. La Comunidad hizo lo mismo en las vías de su competencia y el Ayuntamiento de Madrid elevó de amarillo a naranja el Plan de Emergencias Invernales que había activado el domingo con las primeras nieves. La escalada en el nivel de alerta en la capital se debió a que el espesor acumulado de nieve previsto fue superior a cinco centímetros en el área metropolitana. Las administraciones se pusieron también de acuerdo en sus llamamientos a la población para evitar usar el uso del vehículo privado.

Quitanieves y salmuera. Fomento movilizó 47 quitanieves y la Comunidad de Madrid otras 55 máquinas para atender los 2.500 kilómetros de vías autonómicas. El Ayuntamiento repartió sal y salmuera a lo largo de 1.000 kilómetros entre la M-30, accesos y vías colindantes.

Problemas en M-30 y M-40. Las carreteras de circunvalación presentaron también problemas de circulación y colisiones leves por alcance debido a la acumulación de nieve en la calzada. Tanto la M-40 como la M-30 sufrieron importantes retenciones en todo su trazado, sobre todo por la mañana. En el caso de la M-40, se prohibió la circulación a camiones y se pidió no usar el carril izquierdo para facilitar el tráfico.

Atasco en la M-607. Sobre las 21.00 de este lunes la M-607, la carretera de Colmenar, ha sufrido problemas por la nevada. Un autobús se salió de la vía y provocó atascos en esa zona. Algunos pasajeros decidieron entonces bajar del vehículo y terminar el recorrido a pie, como puede apreciarse en el vídeo que nos envía un lector desde allí. Dos horas más tarde, los problemas han quedado resueltos, según fuentes regionales.

Túneles afectados. La lluvia y la nieve registradas el pasado domingo provocaron el corte en la madrugada de este lunes del paso inferior de plaza de Castilla en sentido sur por filtraciones de agua, lo que complicó el tráfico en la zona a primera hora e hizo temer peores consecuencias. Por la tarde, el carril del túnel de Pío XII que permanecía abierto en sentido M-30 se cortó desde Sinesio Delgado por trabajos de mantenimiento urgente. El tramo en sentido Monforte de Lemos sigue cerrado desde principios de enero.

40 intervenciones de los bomberos. Según Emergencias Madrid, el cuerpo de bomberos de la capital realizó unas 40 intervenciones de escasa consideración a lo largo de la jornada para sanear tejados y fachadas, recolocar antenas descolgadas o por caídas de ramas de árboles. Una de esas ramas hirió en el hombro a un joven en la calle del Alcalde Martín de Alzaga, que fue atendido por el SAMUR y posteriormente trasladado al hospital de La Paz. Otras tres personas fueron atendidas por caídas sin que requirieran atención hospitalaria. En cuanto al tráfico, se registraron tres accidentes relacionados con las condiciones meteorológicas con tres heridos leves en cada uno, aunque todos fueron dados de alta en el lugar.

Seis puertos con cadenas. En la circulación por la Comunidad de Madrid, se prohibió el paso de camiones por la A-1 desde El Molar hasta Somosierra (un equipo de la Cruz Roja se desplazó a la zona para repartir comida y bebida entre los camioneros); en la A-6, desde Puerta del Hierro hasta Collado Villalba, y desde Collado Villalba hasta Adanero. Las cadenas eran anoche necesarias en seis puertos: M-601 (Miraflores de la Sierra), M-601 (Navacerrada), M-604 (Rascafría), M-629 (Canencia) y M-637 (por Lozoya, puertos de Cotos y Navafría). El servicio de Emergencias Comunidad de Madrid 112 gestionó 73 expedientes por incidencias relacionadas con la nevada en la región, nueve a consecuencia de accidentes de tráfico leves, ninguno de ellos de gravedad.

Pin It