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6 septiembre 2016
Sevilla cree que Camarillas y la entrada del tren a Escombreras atraerán clientes
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ANTONIO LÓPEZ | CARTAGENA
La Autoridad Portuaria 'vende' las nuevas infraestructuras a empresarios nacionales para que trabajen a través de Cartagena
Un grupo de obreros trabaja en la plataforma por la que discurrirá el tren que entrará al superpuerto de Escombreras. / A. GIL / AGM
La entrada del ferrocarril al superpuerto de Escombreras y la obras de Camarillas, el baipás que acortará en 20 minutos el viaje entre Cartagena y Madrid, supondrá todo un revulsivo para el movimiento de mercancías en los muelles cartageneros, según la previsión del presidente de la Autoridad Portuaria, Antonio Sevilla. Con la entrada en funcionamiento de ambas infraestructuras «atraeremos empresarios de gran parte de España, sobre todo del centro, aunque también del norte, ya que, de esta forma se mejorarán las prestaciones y los servicios que ofrece nuestra instalación portuaria», explicó Sevilla.
En cuanto a la entrada del ferrocarril al superpuerto, una conexión también imprescindible para el futuro Corredor Mediterráneo, la previsión es que las obras acaben a lo largo del primer cuatrimestre del año que viene. Está presupuestada en 17,3 millones de euros. Los trabajos del nuevo pasillo ferroviario se extienden desde los muelles hasta la estación de Adif del Valle de Escombreras, junto a Repsol.
Las obras de Camarillas, que ya han comenzado, tienen un plazo de ejecución de unos 20 meses, aproximadamente, y un coste cercano a los 36 millones de euros, que serán sufragados íntegramente por la Autoridad Portuaria, en virtud de un acuerdo con el Ministerio de Fomento.
La mejora del ferrocarril situará los muelles entre los más importantes del paísLabores de inspección
La variante tiene la particularidad de que las obras están paralizadas desde hace seis años, lo cual obliga a extremar las labores de inspección para comprobar el nivel de desgaste y deterioro de la parte ya construida, que ha sido la más costosa.
Debido a la importancia estratégica que supondrán ambas infraestructuras, la Autoridad Portuaria ya trabaja para atraer empresarios. Antes del verano ya mantuvo una reunión con un grupo de madrileños para darles a conocer los servicios del puerto. «Lo primero que nos preguntaron es cómo estamos conectados. Les explicamos que en poco tiempo estaremos enlazados con Madrid, con un ferrocarril que entrará directamente al puerto», contó Sevilla.
La mayoría de los industriales con los que ya han contactado son pequeños y medianos empresarios que transportan sus mercancías en contenedores «aunque también los hay que los exportan e importan a granel», añadió.
Con la entrada del tren al superpuerto, los empresarios se ahorrarán costes y tiempo, porque ya no se tendrán que hacer recargas en otros medios de locomoción. «De esta forma resultará mucho más atractivo nuestro puerto para los empresarios, además de que ganaremos en competitividad», concluyó Antonio Sevilla.
