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15 abril 2016

Podemos se suma al bloque antiTAV y pide que circule a «velocidad ordinaria»

Obras del TAV en Ezkio, donde se ubicará una estación.Obras del TAV en Ezkio, donde se ubicará una estación. / LOBO ALTUNA

  • Los nuevos partidos fijan sus posturas en los primeros debates de la legislatura sobre el TAV en el Congreso y Senado

  • La formación morada asegura que la 'Y' vasca es un medio de transporte «elitista, antisocial e insostenible»

    JUANMA VELASCO | SAN SEBASTIÁN.

     

    Una línea de AVE pero a «velocidad ordinaria» y con paradas intermedias. Podemos mostró ayer tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado su postura sobre el desarrollo del proyecto de tren de alta velocidad en Euskadi. Un medio de transporte que no dudó en calificar de «antisocial», «insostenible» y «elitista» porque «acerca a los grandes núcleos de población y aleja a los de interior». Con este mensaje, la formación morada se suma a la postura de otros partidos, como EH Bildu, que cuestionan el proyecto del TAV.

    Las dos cámaras de representación parlamentaria acogieron ayer los primeros debates sobre la 'Y' vasca de la legislatura, en la que los partidos -los de siempre y los nuevos- fijaron sus posturas sobre la infraestructura ferroviaria de alta velocidad que actualmente se construye en Euskadi, con el objetivo de entrar en servicio allá por 2020-2021.

    En el Senado, el Pleno debatió y aprobó una enmienda de sustitución a una proposición no de ley del PNV sobre las obras del TAV, en la que se «insta al Gobierno del Estado a continuar impulsando las actuaciones que ha puesto en marcha y realizar el esfuerzo inversor necesario para poder cumplir el calendario definido para el nudo de Bergara, así como la puesta en servicio del resto de la 'Y' vasca». El texto tuvo el apoyo de la mayoría de la cámara, incluido el PP y Ciudadanos, y la abstención de Podemos y DiL.

     
     
    En el Senado se aprobó un texto del PP sobre el tercer carril y en el Congreso otro del PNV sobre el proyecto 

    Ciudadanos votó en ambas cámaras a favor de las propuestas por el avance de las obras de la 'Y' vasca

    Ya durante su discurso, el senador vasco de Podemos, José Ramón Arrieta, dejó claro que no iban a apoyar la proposición. Durante su intervención, la primera en la que Podemos se refiere al TAV en la Cámara Alta, Arrieta aseguró que la 'Y' vasca «no es una prioridad de la sociedad vasca», a pesar de que «el Parlamento Vasco aprobó con mayoría» el apoyo al proyecto. En opinión del senador de Podemos -que hizo la mayor parte de su discurso en euskera- el TAV «no resolverá el problema de transporte» porque «no va a hacer desaparecer los coches y camiones de las carreteras». Es un medio de transporte «antisocial», «elitista» e «insostenible».

    Podemos presentó una enmienda de sustitución en la que solicita que «se estudie la posibilidad de que el trazado» de la 'Y' vasca «pase a ser un ferrocarril de velocidad ordinaria con paradas intermedias». Esta sugerencia, según se explica en el documento, se justifica por la opinión de expertos que comparecieron en marzo de 2015 en el Parlamento Vasco en la que «recomendaron analizar la conveniencia de seguir o no adelante con las obras de la 'Y' vasca y, en caso de no paralizarlas, plantearon su reconversión en un ferrocarril convencional».

    Podemos parece hacer suyo este planteamiento y, en su texto de ayer en el Senado, plantea «paralizar la construcción» de la 'Y' vasca, pero con un objetivo que no queda cerrado. No en vano, por un lado pide que se «defina un calendario fijo y claro entre el Gobierno español y el Ejecutivo vasco» de la ejecución del proyecto; mientras que por otro reclama que «la inversión económica sea dirigida a la mejora de la línea de ferrocarril que une Irun y Brinkola y de los servicios de Renfe».

    Tercer carril

    Horas después, el debate sobre la 'Y' vasca se trasladó al Congreso, donde se aprobó una proposición del PP defendida por Leopoldo Barreda, en la que se apuesta por «continuar con el esfuerzo inversor para implantar el tercer carril entre Astigarraga e Irun», lo que permite la llegada del TAV a Donostia y a la ciudad fronteriza. El texto, aprobado con los votos de PP y Ciudadanos, contó con la abstención de grupos como el PNV o el PSOE, cuyo diputado Odón Elorza criticó la «maniobra de distracción» del PP con esta moción; y con el voto contrario de Podemos.

    En este caso, fue el parlamentario vasco de Podemos Eduardo Maura quien defendió la postura contraria de su partido. En su discurso, Maura se refirió poco o nada a la implantación del tercer carril. En su lugar, comenzó criticando los «retrasos» en la ejecución de la obra, que atribuyó al Gobierno del PP y el «uso abusivo de las subcontratas» en el proyecto, entre otros asuntos.

    Asimismo, apostó por revisar «la 'Y' vasca con una óptica integral y a todos los niveles de su planificación». Además, señaló que habría que «plantear si alguno de los millones de euros que se han invertido en el TAV no estarían mejor destinados a mejorar la línea convencional» ya existente.

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