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30 octubre 2015

Los almerienses luchan contra su «olvido histórico»

Numerosas personas apoyaron la concentración celebrada ayer en el Parque de la Estación.Numerosas personas apoyaron la concentración celebrada ayer en el Parque de la Estación. / F. GAVILÁN

  • Casi un millar de personas se dan cita en el Parque de la Estación para reivindicar un tren digno para Almería

     

    El Parque de la Estación de la capital se convirtió ayer en el escenario central para reivindicar los sentimientos que comparten la mayoría de los ciudadanos almerienses en torno al «olvido histórico» que sufre la provincia de Almería en materia de comunicaciones, especialmente el relacionado con las infraestructuras ferroviarias.

    Cerca de un millar de personas se dieron cita en la concentración convocada por la Mesa en Defensa del Ferrocarril, plataforma formada por más de 40 organizaciones, que nació expresamente para luchar contra la marginalidad ferroviaria que experimenta la provincia en la actualidad.

    «Hoy es un día histórico para Almería y sus ciudadanos. Hemos iniciado una lucha que tiene que seguir adelante hasta que las administraciones pongan remedio a este abandono». Así lo indicó a este periódico el presidente de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Almería (Asafal), Jesús Martínez.

    El representante del colectivo fue uno de los componentes de la concentración que portaron una pancarta en la que se podía leer 'Buscando vías de solución'. Junto a él se sumaron ciudadanos a título particular así como integrantes y simpatizantes de las 40 organizaciones que han apoyado esta reivindicación y que «representan a miles de almerienses», según detalló el coordinador de la Mesa y secretario de Relaciones Sociales y Sectoriales de CC OO, José Carlos Tejada, para quien la concentración ha supuesto «un primer paso para movilizar a la ciudadanía almeriense».

    Tejada, que recordó que los almerienses tienen una nueva cita el próximo 29 de noviembre con la manifestación que ha convocado nuevamente la Mesa del Ferrocarril, volvió a incidir en que Almería necesita urgentemente una mejoría sustancial «para garantizar una movilidad digna tanto para personas como para mercancías».

    «El futuro de nuestra provincia depende directamente de la modernización de nuestras infraestructuras ferroviarias», insistió el secretario de Relaciones Sociales y Sectoriales de CC OO. Y en los mismos términos se pronunció el representante de la plataforma social Califal (Contra el Abandono de Las Líneas Ferroviarias Almerienses), Andrés Sánchez Picón, quien recordó que esta es la primera vez que se realiza en la provincia «una concentración de estas características para defender una mejora a nuestras olvidadas líneas ferroviarias».

    El representante de Califal recordó, asimismo, que esta es la primera cita de un calendario de movilizaciones para que «nuestra lucha no se convierta en un movimiento efervescente». Así, destacó que con la primera concentración, «todo un éxito de asistencia», se inicia una acción «que debe de perdurar en el tiempo para que nuestra tierra tenga de una vez por todas lo que se merece».

    «¡Súbete al tren!»

    Al grito de '¡Súbete al tren!', los asistentes finalizaron con una concentración que incluyó la exposición de un manifiesto, cuya lectura corrió a cargo del redactor de IDEAL Miguel Cárceles. En dicho documento, el periodista de este diario enumeró las exigencias y reivindicaciones concretadas por la Mesa del Tren a corto, medio y largo plazo para optimizar las comunicaciones en tren, tanto de pasajeros como de mercancías, con el objetivo que redunden en la economía de la provincia.

    «No se trata ya de lo que podemos o no ganar con un servicio ferroviario, sino de lo que podemos perder en materia de PIB, de crecimiento económico y de empleo», destacó Miguel Cárceles durante la lectura del manifiesto, cuya finalización arrancó el aplauso de los cientos de asistentes.

    La Mesa del Ferrocarril recordó que el inicio de esta lucha «debe de estar arropada por toda la sociedad almeriense. Todos estamos hartos de este olvido histórico», lamentaron.

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