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3 mayo 2016
Comunicaciones
El Corredor Mediterráneo se puede retrasar por el hallazgo de restos romanos
El descubrimiento arqueológico en Sagunto abre incógnitas sobre los plazos de los trabajos
01.05.2016 | 04:00
MÓNICA ARRIBAS / J. S. Las obras del Corredor Mediterráneo han sacado a la luz en la localidad valenciana de Sagunto unos restos arqueológicos atribuidos, inicialmente, a la época romana y, en concreto, a un monumento funerario. Se trata de uno de los tramos de la línea férrea que llegará a la Región y este descubrimiento arqueológico puede acarrear el retraso de las obras de la Alta Velocidad.
Las excavaciones comenzaron hace unos días y, por ahora, han dejado a la luz tres fragmentos de muro de gran tamaño. Desde el ayuntamiento de Sagunto no se descarta que, a medida en que avancen los trabajos arqueológicos, haya más sorpresas en la zona y ello pueda acabar teniendo repercusiones en los trabajos ferroviarios; si bien desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) no llegaron a pronunciarse sobre este extremo. Por otra parte, desde la dirección general de Patrimonio valenciana negaron ayer que el hallazgo afecte a los plazos de trabajo para las obras del AVE.
Las primeras hipótesis de los arqueólogos atribuyen los restos encontrados a un mausoleo de la necrópolis romana, citada a finales del siglo XIX por el cronista Antonio Chabret en su libro Sagunto y sus monumentos. Los muros aparecieron cerca del sitio donde, el pasado otoño, un arqueólogo alertó de la presencia de un resto abandonado de época romana.
Sin sorpresas para Adif
El hallazgo de restos romanos no debería haber sorprendido a Adif, responsable de la instalación del tercer carril que habilita el paso de los trenes de Alta Velocidad; sin embargo, una paralización de los trabajos puede interferir de nuevo y hacer inviable que las obras finalicen en agosto, fecha que avanzaron extraoficialmente fuentes del ministerio de Fomento hace unos meses.
Incluso en las horas previas al descubrimiento y paralización de los trabajos, fuentes sindicales del sector ferroviario dudaban que la obra estuviera lista en agosto. En la actualidad se trabaja en la colocación de los desvíos que permiten compatibilizar el ancho ibérico con el internacional habilitado por el tercer carril.
Lejos queda la visita nocturna de la ministra a las obras a la variante de Nules en diciembre de 2014 cuando se comprometió públicamente a que la línea del AVE entre Castellón y Valencia estaría terminada en 2015; un incumplimiento sobre el que nadie, ni en Fomento ni en Adif, ha dado explicaciones.
Ana Pastor reconoció en marzo que el tramo entre Valencia y Castellón debería haber estado terminado la primavera pasada, pero finalmente lo estará en verano porque para cumplir plazos «había que cortar el tramo», explicó. Fomento planteó el cierre provisional de este tramo para poder avanzar en las obras, aunque finalmente la presión de las empresas como Ford y otras del sector siderometalúrgico, unidas a las protestas de los usuarios de la C-6 –que sufren retrasos diarios en sus desplazamientos– hicieron que el Gobierno desistiera.
Tras la conexión de Alta Velocidad entre Castellón y Valencia, la ministra aseguró que «en junio de 2017» el trayecto entre Valencia y Alicante se podrá realizar en torno a una hora. Si se cumple el plazo tantas veces prometido y aplazado, el AVE regional sería una prioridad. No así el Corredor Mediterráneo, que los empresarios de Ferrmed sitúan que llegará a la Región «como pronto» en 2018.
