En los libros de Agatha Christie, pasar la noche en un tren podía ser toda una aventura. Los actuales coches-cama han perdido parte de su encanto, pero un hotel en Reino Unido permite viajar en el tiempo y hospedarse en una antigua estación de tren.

The Old Railway Station es un alojamiento levantado en lo que en 1892 fue una estación de ferrocarril. Se encuentra en Petworth, y según el portal inmobiliario Idealista.com, permite a sus huéspedes evocar los tiempos de la época colonial sin dejar de lado todo tipo de comodidades. (Ver galería de imágenes)

Dos de sus suites se encuentran dentro del edificio de la restaurada estación, mientras que otras ocho habitaciones se sitúan dentro de varios vagones del tren eduardiano Pullman, totalmente reformados. La decoración de las estancias comulga con la esencia de la vieja estación, e incluso dispone de un chimenea de leña en la que se sirve el té a los clientes.

Toda la estación se ha convertido en un hotel original y elegante. La sala de espera es ahora un salón que conserva su techo abovedado de 6 metros de altura. Esta estancia conduce al andén, transformado en una acogedora terraza donde se desayuna en verano.

En invierno, este se sirve en la sala de reservas, que tiene un fuego de leña. La antigua taquilla y la oficina del jefe de estación son ahora el comedor y la cocina, que conserva la ventanilla original de venta de billetes.