El pasado 6 de marzo de 2014, el tren que hacía la ruta entre Jaén y Sevilla colisionó con un camión de gran tonelaje que cruzaba por un paso a nivel sin barreras ubicado en la finca “Grañena”, a escasos cinco kilómetros de la capital. Más de dos años después, el Juzgado de Primera Instancia número 5 debe dirimir quién fue el responsable del accidente. No se trata de una cuestión irrelevante, ya que Renfe reclama a la empresa propietaria del camión la nada despreciable cifra de 134.000 euros por los daños ocasionados en su tren y por el tiempo que estuvo sin poder circular. (Más información en la edición impresa)