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Un nuevo ataque contra ‘La Bestia’, el tren de la esperanza, acaba con un muerto y un herido

20 julio 2013

 
 
 
 
 
 
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bestia

Nuevo ataque contra ‘La Bestia’. Un emigrante hondureño murió y otro resulto herido al ser atacados por hombres armados mientras viajaban clandestinamente el jueves en un tren de carga por el estado mexicano de Veracruz (este). En un escueto comunicado, las autoridades reconocían con las consecuencias anunciadas el ataque a algunos de los ‘pasajeros’ clandestinos que viajaban a bordo del tren de carga conocido como ‘La Bestia’, utilizado por emigrantes -principalmente centroamericanos- para tratar de llegar a Estados Unidos.

Según la prensa local, el ataque ocurrió en la localidad Moloacán y estuvo dirigido contra unos veinte emigrantes que iban en el mismo vagón. El hondureño que resultó herido se habría arrojado del tren, logrando huir y avisar a las autoridades. “Todo indica que (el ataque) fue con la intención de cobrar la cuota” que la delincuencia organizada en México impone a los migrantes para dejarlos recorrer ciertas rutas en su viaje hacia el Norte”, explicó Rubén Figueroa, defensor de los derechos humanos de los indocumentados.

El activista, que por amenazas de la delincuencia vive escondido, comentó a la AFP que los delincuentes cobran la cuota de manera cotidiana, y “los que no tienen para pagarla son lanzados del tren o asesinados“. El pasado primero de mayo una veintena de centroamericanos resultaron lesionados con arma blanca en la misma zona del estado de Veracruz.

“El gobierno de Veracruz no tienen interés en que cese la violencia en la ruta migratoria, al contrario, con su desinterés y complicidad la alientan”, aseguró Figueroa.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ha estimado que unos 20.000 emigrantes son secuestrados cada año para exigir el pago de un rescate a sus familias en Centroamérica o Estados Unidos. Unos 140.000 emigrantes indocumentados, principalmente centroamericanos, ingresan anualmente al país, según la misma fuente, y muchos de ellos son objeto de secuestros, extorsiones y asesinatos.

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