Categoría: Curiosidades
Visto: 717

ELPAIS.COM

27 noviembre 2013

OPINIÓN

El AVEstruz

Fabra va a hacer un AVE que permitirá viajar de Alicante a Castellón en 80 minutos. ¡Toma ya!

25 NOV 2013 - 21:36 CET

Fomento licitará este año el último tramo del AVE a Alicante y en junio, todo lo relativo al AVE a Castellón

Alberto Fabra se ha lanzado a la pista este fin de semana y ha iniciado una carrera a lomos de un avestruz, que, como todo el mundo sabe, es un pajarraco portentoso, capaz de alcanzar grandes velocidades en cuatro zancadas. El presidente de la Generalitat le ha estado dando vueltas al magín y se ha sacado de la chola un anuncio sorprendente. Va a hacer un AVE que permitirá viajar de Alicante a Castellón en 80 minutos. ¡Toma ya! Nadie se lo había pedido, pero este hombre es un adelantado a su tiempo y como este país no tiene problemas, ni deudas, ni inversiones pendientes, su presidente corre veloz hacia el futuro. Un futuro que fija en 2016, que es para cuando ha anunciado su puesta en servicio. El arrojo ferroviario de Fabra, solo tiene un precedente, el inolvidable Johnnie que protagonizó Buster Keaton en El maquinista de la General. Así que don Alberto bien merecería el título de El maquinista de la General(itat), sin duda más augusto que el de su predecesor, El gran timo(nel) de las promesas y esperanzas valencianas, el por lo demás molt honorable Francisco Camps.

Queda por explicar cómo se las arreglará Fabra para que el AVEstruz cubra los 250 kilómetros que separan Castellón de Alicante en solo 80 minutos, teniendo en cuenta que la velocidad máxima de estos pajarracos es de 90 kilómetros por hora. Pero habrá que reconocer que ésta es una velocidad vertiginosa si la comparamos con la parálisis que caracteriza la gestión del Gobierno que preside. Además, ya se sabe que, especialmente cuando se trata del PP, las promesas electorales hay que tomárselas a beneficio de inventario. Por lo que hay que relativizar las cosas y verlas en su contexto. Y así, convendrán conmigo, que los 90 kilómetros hora del AVEstruz representan todo un avance respecto a la velocidad de los aviones del Aeropuerto Internacional Carlos Fabra, que es como merece ser bautizada tan preclara infraestructura. Unas instalaciones que, llegados donde estamos, bien podrían reconvertirse en una gran granja de avestruces. Porque, digo yo, muchos avestruces por aquí no hay; y, si queremos que el uso de un modo de transporte tan natural y ecológico como es el AVEstruz no quede limitado a las élites políticas y empresariales, habrá que montar una potentísima granja de avestruces, con sus correspondientes pistas de doma y adiestramiento, pues estos animales tienen bastante mal genio y no se prestan así como así a ser montados.

Habrá mentes retorcidas de la oposición, de esos que no dejan trabajar a Fabra y su Gobierno, que piensen que todo esto del AVEstruz no es sino un reflejo de la política del presidente de la Generalitat, que esconde su cabeza como hace esta extraña especie de camellos con alas, cuando vienen mal dadas. Créanme, se equivocan de medio a medio. Si el Maquinista de la General(itat) no desengancha a los imputados de su grupo parlamentario, no es porque se quedaría en minoría, es por una cuestión humanitaria. La misma por la que sus diputados han pedido el indulto del exalcalde de Torrevieja, Pedro Ángel Hernández Mateo, a la que él no se ha sumado, por prudencia institucional. Y si no convoca elecciones anticipadas, no es porque tema perderlas, sino porque tiene claro que debe terminar su mandato para dejar encarrilado este gran proyecto del AVEstruz, Alicante-Castellón, pasando, naturalmente, por Valencia.