A Coruña, 11 dic (EFE).- La defensa del maquinista investigado por el caso Alvia ha anunciado hoy la solicitud de sobreseimiento para Francisco José Garzón Amo, al entender que "no cometió ninguna imprudencia grave", sino que la imprudencia grave "fue no revisar la seguridad de esa línea".

"Si no se han hecho los exámenes de seguridad pertinentes, si no hay señales que alerten de que hay que bajar la velocidad, si hay una serie de túneles, si no hay balizas y encima le roban la atención porque le llaman del trabajo, ¿dónde está ahí la responsabilidad?", ha asegurado el abogado del maquinista, Manuel Prieto, en declaraciones a Efe.

El abogado formalizó el recurso ante el juzgado de Instrucción número tres de Santiago de Compostela y en sus 95 páginas repasa la normativa aplicable al caso, revisita informes periciales y recoge tanto declaraciones vertidas en la Comisión de Investigación del caso en el Congreso de los Diputados como partes del informe de la Agencia Ferroviaria Europea (AFE).

"El juez ni siquiera cita el informe de la AFE ni muchas de las declaraciones que ha habido en el Congreso, donde se han dicho cosas muy interesantes; parece que el juez o no ha visto ninguna o no le ha interesado ni ha hecho nada", ha denunciado Prieto.

El juez instructor, Andrés Lago Louro, cerró hace una semana la fase de instrucción con el maquinista y el director de Seguridad en la Circulación de Adif en el momento del accidente, Andrés Cortabitarte, como únicos investigados, sobreseyendo el caso para dos altos cargos de Renfe y Adif y tres técnicos de Ineco.

"Mi defendido pudo tener un despiste de unos segundos, pero estos señores han tenido un despiste durante años porque les ha dado la gana", ha señalado el abogado, quien también ha apuntado que "lo que le pasó a él podría haberle ocurrido a cualquier otro maquinista: el accidente es achacable a las condiciones de la vía, no a las del conductor".

En este sentido, el letrado ha recordado que "no se ha investigado siquiera cuál era la condición del maquinista", circunstancia que reitera en el recurso, donde hace referencia al único informe al respecto, el elaborado por la experta en factor humano Pilar Calvo a instancias de la defensa y que no ha sido mencionado en el auto en ningún momento.

El abogado ha destacado que el escrito del juez con respecto de su defendido "es exactamente igual que el de 2015" y que "parece que ha elaborado otro para el señor Cortabitarte y los ha juntado", obviando de esta forma toda la información que ha salido a la luz desde la publicación del primer escrito.

De este modo, Prieto ha solicitado el sobreseimiento y, de forma subsidiaria, "si el juez entiende que se ha cometido un ilícito penal, los hechos serían constitutivos de falta", ya que el maquinista "estaba cumpliendo con la actividad profesional que se le encomendaba".

El recurso, además, sitúa a Garzón como "una víctima más", ya que su empresa habría cometido un delito con los derechos de los trabajadores "al no haber analizado los riesgos del centro de trabajo, en este caso el tren", lo que "habría provocado el fallecimiento de dos trabajadores y herido a otros cinco".

El letrado ha concluido que se le ha imputado a Garzón Amo una "imprudencia grave" cuando, según ha expresado, "no ha infringido ni rebasado ninguna señal que indicase que debía reducir la velocidad; simplemente la reducción de velocidad no estaba indicada y, para cuando tiró del freno de emergencia, ya era demasiado tarde".

"A mi cliente se le podría exigir responsabilidad si hubiera cometido una imprudencia en una línea con unas circunstancias óptimas, que no era el caso; no se puede pedir la misma responsabilidad que si los responsables de seguridad hubieran revisado y subsanado todos los errores", ha zanjado.

Prieto ha sido especialmente duro con el gerente del área de Seguridad en la Circulación del noroeste de Adif, Fernando Rebón, cuyo caso fue sobreseído en el último auto del juez a pesar de ser el responsable de la seguridad en el tramo en que se encontraba la línea afectada, Ourense-Santiago.

"¿Para qué es gerente de la zona pues? Tendrá que analizar los riesgos de la vía, me parece muy bien que se hiciese un análisis inicial, pero hay que realizar inspecciones para comprobar en qué estado está, cosa que pudo hacer en los 18 meses posteriores o cuando se desconectó el ERTMS", ha apuntado el letrado.

El juez instructor ha situado como únicos investigados a Andrés Cortabitarte y al maquinista, de modo que probablemente en la siguiente fase, del juicio, se tendrá que determinar si fueron responsables de 80 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional y otros 144 de lesiones.

El siniestro se produjo el miércoles 24 de julio de 2013, víspera del Día de Galicia y en plenas fiestas del Apóstol Santiago, cuando un tren Alvia que viajaba de Madrid a Ferrol (A Coruña) descarriló en la curva A Grandeira, en Angrois, a unos tres kilómetros de la estación de Santiago de Compostela. EFE